domingo, 17 de agosto de 2014

Copla castellana




 Canción que del alma sale
es pájaro que no muere:
volando de rama en rama
Dios manda que viva siempre.


Gonzalo Castrillo Hernandez, publica en Palencia, en 1922, un "Estudio sobre el canto popular castellano" (reeditado en facsimil por Editorial Maxtor en 2008) donde ampliamente documentado e incluyendo partituras musicales y hermosas ilustraciones, se hace un recorrido por el origen y evolución de esos deliciosos cantares tan cercanos a la idiosincrasia de nuestros pueblos, incluyendo canciones de cuna, de las que dice Rodrigo Caro que son "madres de todos los cantares y cantares de todas las madres". De las páginas de este "Estudio" entresacamos esta hermosa copla de Ruiz Aguilera, para refrescar el agosto zaragozano.

(Heraldo de Aragón 17.8.2014)

domingo, 3 de agosto de 2014

San Lorenzo



No te pongas muda nueva
que aún no es tiempo del almuerzo
espera a ver que sucede
pa' luego de San Lorenzo.


José Antonio Labordeta, de quien es esta copla, veraneó muchos años en Villanúa, allá por el Pirineo Aragonés, hermoso y entrañable lugar al que yo iba desde adolescente. En agosto, cuando llegaba San Lorenzo, se animaba la colonia vacacional y bajábamos a Huesca, nosotros "los almendrones" o "cheposos", a compartir con "los fatos" (curiosidad etimológica la de estos apodos) sus estupendas fiestas. Noches inolvidables en que escuchabamos conciertos (recuerdo la noche con Mocedades), tomabamos copas y cantabamos y bailabamos hasta el alba. Hoy, que nuestros hermanos de Huesca celebran a su patrón, les enviamos el mejor de los abrazos.

(Heraldo de Aragón, 10.8.2014, festividad de San Lorenzo, Patrón de Huesca)

Una copla en Triana



Cuando Dios creaba el mundo
en el cielo, una mañana,
arreglaba sus papeles
para venirse a Triana.


"Sevilla tiene un color especial" es el estribillo de la famosa canción de Los del Río, esa pareja folclórica que en 1993 arrasaron con su famosa "Macarena". Pero es verdad: Sevilla, a orillas del Guadalquivir, nos conquista cada vez que bajamos por allá. Tomando unos "pescaítos" en Alboreá, de Triana, nos obsequiaron junto a la cuenta -muy ajustada- con esta copla que no me resisto a repetir. Gracia, buen humor...y precios bastante más baratos que por acá arriba, sobre todo en lo que a hostelería se refiere. A ver si vamos imitando lo bueno y damos "color" también, con un poquito de esfuerzo por parte de todos, a la hermosa orilla del Ebro...

(Heraldo de Aragón 3.8.2014)