domingo, 28 de septiembre de 2014

Manuel Pinillos



Digo que no hay nada aún perdido.

Tiene la luz aún mucha fuerza.

No creo yo que haga esta sombra

que el sol futuro se oscurezca.

Manuel Pinillos Decruells (Zaragoza 1914-1989) fue poeta, crítico literario y compañero de colaboraciones en Heraldo durante muchos años. Su poesía abarca desde 1948, en que publica su primer libro, “A la puerta del hombre”, hasta 1982, con el último de sus veintidós poemarios, “Cuando acorta el día”. Su obra ha sido antologada por el poeta Ángel Guinda en un interesante tomito de la colección Papeles de Trasmoz de Editorial Olifante, que completa los trabajos de José L. Calvo Carilla y Mª Pilar Martínez Barca de 1990 y 2008, respectivamente. Justos homenajes a un poeta un tanto desconocido para las nuevas generaciones y que merece un lugar destacado en la poesía aragonesa del siglo XX. He aquí el inicio de su poema “Días mejores”.
Heraldo de Aragón, 28.9.2014.

sábado, 20 de septiembre de 2014

Aquellos tiempos...

 
 
 En Marruecos cada moro
tiene esclavas cien mujeres
y aquí nos llevan las mozas
prendidos con alfileres. 
 
 
Mariano Gracia Albacar, en sus "Memorias de un zaragozano", que abarcan los años 1850 a 1861, y que han sido editadas hace unos meses por la Institución "Fernando el Católico" (Edición y notas de Fico Ruiz. Introducción de Carlos Forcadell) , narra con cuánto fervor se vivía en Aragón la guerra de África. Me informa el amable erudito Gustavo Fau, que se había ofrecido una gran acogida a los voluntarios catalanes que iban a ponerse a las órdenes del general Prim, que era de Reus. En el Teatro Principal, en el año 1856, actuaba el tenor Carratalá. Era un cantante cómico muy popular, que improvisaba intervenciones al hilo de la actualidad. En la obra "Las ventas de Cárdenas", según recogió Gracia, cantaba esta copla, muy celebrada por el público y que hoy, testimonio curioso de aquellos tiempos, recogemos en el Rincón. 

Heraldo de Aragón 21.9.2014. 
(Imagen: Teatro Principal de Zaragoza en la actualidad. Imagen de Manuel Arribas)


sábado, 13 de septiembre de 2014

Coplas en el Delta


Una música en el aire
sin palabras te ha dejado;
por los caminos del Delta
vida y muerte van cantando.


Artur Ballesté es el seudónimo con que el Poeta del Delta (cuyo nombre no desea que, por el momento, aparezca en estas líneas, aunque los lectores avezados y atentos lo conocemos ya por su trayectoria y buen hacer poético) ha compuesto una serie de hermosas coplas, de las cuales esta que hoy traemos aquí es un buen ejemplo. Es un delicado poema que nos trae el aroma del río, del Padre Ebro que, al llegar al mar, extiende generoso sus brazos y crea un entorno muy bello, un paraje excepcional que todos tenemos la obligación de preservar y mantener, por encima de ambiciones e intereses espurios de unos pocos que solamente piensan en engordar sus cuentas en Suiza y en quienes, por desgracia, late un corazón de caja registradora. 
 (Heraldo de Aragón, 14.09.2014)

lunes, 8 de septiembre de 2014

Perogrullada



Las mujeres parirán
si se empreñan y parieren.
Y los hijos que nacieren
de cuyos fueren serán.

El mundo de la copla y su formato dan tanto para un gran micropoema, como para una glosa de acontecimientos, noticias, exaltación de esto y lo otro y, cómo no, crítica jocosa o cruel (véase la famosa copla de La Dolores) y también sentencias. O perogrulladas, como es el caso de la copla de hoy, que tiempos hubo de gran predicamento de la copla como forma y manera de transmitir las más diversas y singulares noticias. Mi sabio amigo Ginés Félix me envía nueva información de interés y me comunica que en su obrita "La visita de los chistes", el autor (se supone que un sosias del mismo Quevedo), habla con Pero Grullo, el cual le hace varias profecías en forma de copla (en este caso, redondilla) y esta que les transcribo a mis pacientes lectores es una. E indiscutible. 
 (Heraldo de Aragón 7.9.14)