sábado, 27 de junio de 2015

Carlos Fernández Shaw.






Cuando sueño con la Muerte
sueño también con mi tumba;
tumba de piedra sencilla,
donde me busque la luna.



Carlos Fernandez Shaw (Cádiz, 23 de septiembre de 1865 - El Pardo, Madrid, 7 de junio de 1911), fue un dramaturgo, poeta y periodista español, padre del también periodista y continuador de su obra Guillermo. Estudió en Cádiz y más tarde se trasladó a Madrid. En su ciudad natal, ganó como estudiante varios premios de poesía. En 1883 publicó su primer poemario, "Poesías". Se licenció en Derecho en Madrid y colaboró en numerosos medios periodísticos de la época, siendo director de la Sección de Literatura del Ateneo madrileño. Después se dedicó al teatro, componiendo el libreto de "La Revoltosa", con José López Silva. Madrid dedica a padre e hijo una moderna avenida y en su tumba, en el cementerio de La Almudena, figura esta hermosa cuarteta suya.

Heraldo de Aragón, 28 de junio de 2015

domingo, 21 de junio de 2015

Teresa de Ávila



Vida, ¿qué puedo yo darle
a mi Dios que vive en mí,
si no es el perderte a ti,
para merecer ganarle?



Santa Teresa de Jesus (Ávila 28 de marzo de 1515- Alba de Tormes, 4 de octubre de 1582), es motivo este año de especial recuerdo y homenaje por causa del quinto centenario de su nacimiento. La vida y obra de la Santa de Ávila, vehemente y apasionada en sus propósitos, es absolutamente impresionante. En su quehacer literario, dejó un amplio espacio para la poesía místico-religiosa con una extensa obra a la que invito a acercarse a los lectores no conocedores de ella. Su sensibilidad e inteligencia literaria hacen de esta autora y mística una de las personalidades más destacadas del Siglo de Oro español, junto a otro místico, San Juan de la Cruz. Lean muy atentamente el fragmento que hoy les proponemos y comprobarán el "calado" de su poesía.

Heraldo de Aragón 21 de junio de 2015

lunes, 15 de junio de 2015

Cierzo



Una copla trajo el cierzo
a tu oído aquella tarde;
te dijo que yo te amaba
y se marchó con el aire.


La letra de las jotas, la copla aragonesa, es vehículo de expresión de diferentes sentimientos. A pesar de la ‘bravura’ que casi de una manera tópica se quiere asociar con nuestro primer cante regional, hay muchas letras que con belleza lírica expresan sentimientos para ser cantados casi al oído, con delicadeza y sensibilidad. Esto ocurre ya, por fortuna, con varios intérpretes, mujeres y hombres, que matizan y cantan con expresividad y buen gusto, sin que por ello la jota pierda un ápice de fuerza y de belleza. Animamos a los intérpretes, desde aquí, a renovar e incorporar nuevas letras a sus tonadas, sin miedo a las que expresen sentimientos amorosos con refinamiento y ternura, en la seguridad de que, también en ellas, brilla la autenticidad de la jota.

Heraldo de Aragón 14 de junio de 2015


lunes, 8 de junio de 2015

Nueva primavera





Para tu amor he nacido
para el beso de tu boca
para la luz de tus ojos
para ser siempre tu sombra.



La primavera excita los ánimos poéticos y, a la par que las flores, surgen los versos y las estrofas de la pluma de los poetas. Estamos ya en junio y llegan las Ferias del Libro , que cada vez se celebran en más localidades aragonesas. Allí, entre los escritores, estarán los sufridos poetas y expondrán los frutos, tantas veces utópicos, de su imaginación. Antiguamente, en estas fechas primaverales, se celebraban “juegos florales” donde se cantaba al amor y a la nueva estación pero ahora los tiempos no parecen propicios para la poesía. No obstante, hay que combatir esa tendencia. Por eso voy a publicar una copla de amor, acto que algunos pueden considerar “demodé” pero es que el amor ("quien lo probó lo sabe") se enardece más en primavera.

Heraldo de Aragón, 7 de junio de 2015
Imagen: Mayusta (S. Matías. Budapest. Detalle pináculo)


Ildefonso M. Gil

La torre de mi pueblo
tiene un balcón.
La luna lo blanquea
lo dora el sol.



Ildefonso Manuel Gil (Paniza 1912-Zaragoza 2003) es un poeta fundamental en las letras españolas del pasado siglo. Su condición de aragonés -como suele pasar por estas tierras- tal vez le quitó la proyección que merecía por su obra, menos reconocida a nivel nacional de lo que debiera serlo. Fue profeta, querido y respetado, en su tierra, y en Estados Unidos, donde emigró en los años sesenta. Lo conocí y traté en aquellos años, (junto a su hijo Alfonso, buen amigo mío y ya fallecido) en el Instituto Goya, donde era secretario hasta su marcha. Volvió a Zaragoza en los primeros ochenta y tuvo reconocimiento y honores aragoneses hasta su fallecimiento. Esta coplilla está en la etiqueta una botella de buen vino de su tierra, que así le rinde homenaje.

Heraldo de Aragón, 31 de mayo de 2015