Vengo detrás de una
copla
que había por el sendero,
Copla de llanto aromada
con el olor de este tiempo.
que había por el sendero,
Copla de llanto aromada
con el olor de este tiempo.
Hay lectores e incluso
poetas que creen, todavía, que la copla es un poema menor (o, aún
peor, que ni siquiera es poema) y no un minipoema. Es extraña
actitud de quienes, a veces, consideran más relevantes estrofas
ajenas a nuestro ámbito y mentalidad, como el Hayku. Por ello,
traemos hoy aquí un bonito ejemplo en la pluma de nuestro Premio
Nobel de Literatura, Juan Ramón Jiménez (Moguer, Huelva, 23 de
diciembre de 1881-San Juan, Puerto Rico, 29 de mayo de 1958) que
utilizó esta bella estrofa y, sobre todo, el verso octosílabo
-llamado de arte menor no por su menor importancia poética sino por
su númeno de sílabas- en una parte fundamental de su extensa obra.
Bella copla el ejemplo de hoy, estrofa que tantos grandes poetas
cultivan desde hace siglos...
Heraldo de Aragón, 25 de junio de 2017
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