viernes, 6 de diciembre de 2019

Rincón de la copla. Diciembre 2019



No llores tú por mis penas
que aunque son grandes y muchas
todas mis penas no valen
lo que una lágrima tuya.


En este mes de diciembre, cerca ya del 2020, estamos repasando una serie de autores que a principios del siglo veinte fueron, además de excelentes poetas y como tales, creadores de hermosas coplas. La finura de sentimientos aparece con frecuencia como una de las facetas de numerosas coplas aragonesas. Diferentes autores han ennoblecido las cantas con su aportación. Luis Ram de Víu (m.1907) es uno de estos poetas de la copla: elegancia y pulcro estilo adornan sus cuartetas. Se le llamó "poeta de los muertos" por haber compuesto sus poemas, solitario y triste , en el cementerio de Zaragoza. Su obra figura en recientes antologías. De entre sus numerosas coplas elegimos ésta, melancólica y suave, para ser cantada como jota emocionada y profunda.






El cantar aragonés
no tiene de miel dulzor;
es un vaso de agua fresca
con goticas de limón.


El humorismo y la sátira es una constante en las coplas de jota, como lo son la Virgen del Pilar, la tierra, las gentes, el Ebro y sus aguas o el sentir aragonés. Aunque hoy se produce una encomiable evolución de las cantas, es imprescindible atender a la tradición para valorar ese tránsito necesario e indispensable. En el último tercio del siglo diecinueve y hasta mitad del veinte fueron muchos e ilustres los autores que, como don Gregorio García-Arista, académico, escritor e historiador (Tarazona 1876-Zaragoza 1946), desgranaron hermosas coplas.“Restaurador de la verdad de un tipo (el aragonés) harto zarandeado, por desgracia” (Heraldo de Aragón, 1918) de él transcribimos una hermosa jota de siempre, que define la esencia del cantar aragonés.





La Virgen del Pilar dice
que no quiere ser francesa,
que quiere ser capitana
        de la tropa aragonesa.


Benito Pérez Galdós (Las Palmas 1843-Madrid 1920) está considerado como uno de los más grandes novelistas de nuestra lengua. Publicó “Zaragoza” en marzo-abril de 1874, dentro de la primera serie de “Episodios Nacionales”, ingente obra compuesta de cuarenta y seis novelas agrupadas en cinco series. En el capítulo once de la citada obra hace referencia a esta copla, reconocida como un clásico de nuestro folklore y cantada sobre todo como jota de baile o rondadera,. El famoso escritor la pone en boca -“cantando todos en inmenso coro”- de los valientes defensores de la Ciudad, que ostenta asimismo el título de “Heroica” por el protagonismo de aquella gesta contra las tropas napoleónicas, que cambió la faz de nuestra ciudad por mucho tiempo.





Quince años de relaciones 
y ya 'quiés' que nos casemos;
¡no me seas impaciente
que estas cosas 'requién' tiempo!


Considerado como componente da la“generación becqueriana”, Eusebio Blasco y Soler (Zaragoza 1844-Madrid 1903) fue progresista, delicado poeta y fecundo autor teatral (setenta y cuatro obras) costumbrista y paródico. También publicó cientos de crónicas y artículos periodísticos, muchos de ellos en Heraldo de Aragón. Tiene su calle en Zaragoza, que flanquea el Teatro Principal. Fundó un semanario en 1898 (Vida Nueva) y publicó diversas colecciones de poesía y cuentos y, entre ellos, “Cuentos aragoneses” a principios del siglo veinte. (“Los llamo así porque ya se han publicado varias colecciones de cuentos baturros...”). Frescos y costumbristas, de ellos extraemos esta simpática copla y le recordamos de nuevo con mucho cariño.

(Heraldo de Aragón, 8, 15, 22, 29 dic. 2019)



sábado, 16 de noviembre de 2019

Rincón de la copla .Noviembre 2019




De noche te voy a ver/
y me llevo la guitarra, /
pues te gusta que te toque /
y yo te obedezco, maña.


Jesús Gracia, el inolvidable maestro de la jota cantada, tuvo una dilatada carrera llena de reconocimientos. Hace ya mucho que nos dejó y también su compañera en la vida y en el canto, la recordada Piedad Gil, poseedora también de una exquisita técnica y sensibilidad. Jesús cantó mucho y cantó bien, pues nuestra jota tiene una enorme variedad de estilos que la enriquecen y hacen que constituya un valioso acervo cultural. Entre los que interpretaba está el estilo "la Tripería" que, según mis noticias, se canta principalmente en Épila. Hoy traemos a este Rincón una canta que juega con el obvio doble sentido del verbo tocar y que tiene finura y desparpajo. Y aprovechamos para mandar un abrazo a tantos buenos amigos de Épila que siguen estas líneas.







Glorioso San Sebastián,/
que estás en ese madero,/
casa a las mozas de Caspe /
que se les pasa el tempero.



Gabriel María Vergara Martín publicó en 1923 en Madrid un "Diccionario Geográfico Popular de cantares, refranes, adagios, proverbios, locuciones, frases proverbiales y modismos españoles".
Cita algunas coplas célebres caspolinas, que mi querido compañero de página y caspolino de pro, Alberto Serrano Dolader, me hizo llegar con todo cariño hace ya unos años. Son coplas llenas de ingenuidad y encanto que, seguro, eran entonadas por nuestros abuelos en las numerosas rondas que tenían lugar antiguamente durante las fiestas de los pueblos y que hoy, en su mayoría, han desaparecido a manos de las discomóviles rockeras. No obstante aún se siguen escuchando en determinados lugares que mantienen, como Albarracín y su entorno, tradiciones como los "Mayos". De todo tiene que haber.







Con la vida que me traes/
y la muerte que me llega,/
voy a hacer un cielo aparte/
para que mi amor no muera.


José María Lopera, es un poeta andaluz con una larga trayectoria. Publica, fundamentalmente, letras para los diversos "palos" del flamenco -que son cuarenta y ocho- donde predominan las estrofas de cuatro (como nuestras cantas joteras) y tres versos octosílabos, quintillas, décimas, romances y agrupaciones polimétricas. Lopera publicó hace unos años un imprescindible libro "Flamenco para cantar palo a palo" donde se desgranan todas estas formas estróficas que ilustra con inspiradas letras. Tienen Andalucía y sus gentes un cariño y un cuidado muy especial con su rico folclore: lo cuidan, lo miman y lo propagan y es ejemplar el culto que se profesa al flamenco. Invito a conocer, y a transplantar a nuestra querida jota, esas maneras de dignificar y engrandecer el folclore, acervo cultural irrenunciable.






Tú no eres vela ni bruma/
que el horizonte corona:/
Eres suspiro del mar/
que me besa en cada ola.


Demófilo, Rodríguez Marín, Fernán Caballero, Augusto Ferrán, Gustavo Adolfo Bécquer, Salvador Rueda,. Juan Ramón Jiménez, los Machado, José Bergamín...todos ellos han publicado o recopilado importantes colecciones de coplas que han sido adaptadas, principalmente, por el folclore andaluz. En Aragón, también tenemos diferentes cancioneros y autores que citamos frecuentemente. El mireño Francisco Padilla, señala con acierto que "Las coplas y versos populares, son el resultado del ingenio y sentimiento de quienes los componen, constituyéndose en un aporte en la transmisión oral, cultural y popular de un pueblo que vibra y se emociona al escucharlos o leerlos, porque generalmente se identifica con ellos". La copla de hoy es de José María Lopera.

Heraldo de Aragón.
Noviembre 2019
3, 10, 17, 24





martes, 8 de octubre de 2019

sábado, 5 de octubre de 2019

Rincón de la copla. Octubre 2019.



Tiene la copla española /
hechuras de buen poema /
y aunque la llamen canción /
siempre será una cuarteta.



El profesor Javier Barreiro, estudioso del floclore de diversas geografías y de nuestra jota, nos plantea una cuestión muy interesante, ya que comenta que “se ha hecho común denominar “copla” a la canción española. Esto lo popularizaron, a finales de los 60-primeros de los 70, Lauren Postigo y otros de su calaña, condición y caletre, ampliando el significado de una palabra que, por sí misma es bastante polisémica. Pero la copla no dejará ser una composición popular de cuatro versos octosílabos, en la que riman los pares en asonante”.
Y es que la copla, estrofa, es una de las principales muestras de nuestra poesía desde hace siglos , aunque se haya extendido más recientemente esa denominación a la, por otra parte, muy rica expresión musical de la canción popular española.




Son tus quereres, mañica /
como las alas del Cierzo /
y mi corazón, la vela /
que se llena de tu viento.

Estamos en plenas Fiestas del Pilar, cuando –además de otros muchos festejos- centenares de miles de zaragozanos y visitantes llenan de alegría y bullicio nuestra ciudad. También la jota, cantada y bailada, sale a la calle en diversos escenarios, conservando las letras (cantas) tradicionales y dando paso a nuevas, aunque no en la medida deseable, pues la jota pensamos que debe ser, respetando su tradición e historia, objeto de renovación y actualización permanente, para así mantenerla joven y bella, como la gran dama que es de nuestro folclore regional. Feliz estancia, paisanos y visitantes -que nunca es nadie extraño en Zaragoza- y sigan disfrutendo, en paz y con alegría, de los actos tradicionales y de todo el amplio programa de nuestras Fiestas. Merece la pena.



Gallo de la Magdalena,/
cuida de la plaza un rato,/
que nos vamos a rondar /
a la parroquia del Gancho.


Zaragoza tiene dos barrios emblemáticos y que tradicionalmente han tenido una cierta rivalidad. Por una parte la Parroquia Baja, formada por el barrio de las Tenerías, así llamado porque alli habitaban y trabajaban los artesanos de la piel y la Parroquia de La Magdalena con su iglesia,que hoy está felizmente rehabilitada y muestra todo su esplendor. Por otra parte está la Parroquia Alta, con el barrio de San Pablo y la bella iglesia llamada tercera catedral de Zaragoza. Es este barrio cuna de grandes joteros y de una figura universal de la ópera, la gran Pilar Lorengar, que vivió sus primeros años en una casa de la calle Las Armas, 92, hoy solar. Las coplas alusivas a las dos parroquias, del Gallo la Baja y del Gancho la Alta, son innumerables. He aquí una de ellas.




¿Qué tiene la jota, madre? /
Madre, ¿qué tiene la jota /
que hace llorar a los viejos /
y alegra a la gente moza?


El barrio de San Pablo, Parroquia del Gancho, ha sido cuna (además de la inmortal figura de la ópera Pilar Lorengar, que debería dar nombre al Auditorio de Zaragoza), de grandes personajes del mundo de la jota, como Joaquín Numancia, Mariano Cebollero Bel. Florencio Santamaría y muchos otros, recogidos en diversas publicaciones sobre el mundo jotero. Mención especial merece Ángel Abad Tárdez, pues su actividad transcendió de la puramente jotera, ya que fue autor de obras teatrales, numerosas coplas que recogió y publicó y persona dinamizadora de la cultura que mantuvo durante años una tertulia por donde pasaron grandes personajes del mundo de la jota, la literatura y la música. De él es esta copla, famosísima, que hoy traemos hasta este Rincón.


(Heraldo de Aragón, 6, 13, 20 y 27 de octubre de 2019)




























Fiestas del Pilar 2019. Coplas diarias en Heraldo de Aragón.

Se aleja hacia el mar el Ebro
bailando alegre la jota
porque se ha hecho baturrico
al pasar por Zaragoza.

                                                             Junto al Pilar duerme el Ebro
acunado por la jota 
y la Virgen del Pilar
lo contempla silenciosa.
Ni gigantes ni muy chicos
ni muy nobles ni muy tercos,
llamadnos aragoneses
que ya es bastante con eso.

                                                             La luz de Aragón destella
en esa Plaza grandiosa
donde están Ayuntamiento
La Seo, Pilar y Lonja.

Las fuentes de Zaragoza
nunca se podrán secar,
porque el amor de los maños
es perpetuo manantial.

                                                             La noche en la Aljafería
cuenta despacio las horas
y pasea por sus muros
confundida con las sombras.

Cuatro cosas necesito
para salir con la ronda:
guitarra, noche, alegría
y el cariño de mi moza.

                                                             Es el Día del Pilar:
ofrenda, jotas y fiesta.
Con música y alegría
Zaragoza se despierta.

Al venir a Zaragoza
visita siempre el Pilar:
verás un río constante
de amor, oración y paz.

sábado, 28 de septiembre de 2019

La copla, por Valentín Martín




 El escritor y periodista Valentín Martín, publica este magnífico artículo sobre la copla en el periódico "Salamanca al día".
Muchas gracias por citarme.

Pinchad el enlace:
https://salamancartvaldia.es/not/217178/la-copla/?fbclid=IwAR2QxptLufKsLYMeqa0G5NDskIgPAe1_deBMUEMjvgh-qP98Lotx-OE0PcI

Texto:

Una de las señas de identidad de la dictadura franquista es su voracidad por apropiarse de todo. Incluso del pantano de mi pueblo, una idea de don Filiberto Villalobos, médico, ministro de la segunda república, y sobre todo paisano. Qué faena nos hizo usted, don Fili. A la idea de don Fili le siguió el proyecto de Indalecio Prieto, que es quien tenía las competencias para hacer el pantano. Todo quedó interrumpido por  el golpe de Estado. A la república no le dio tiempo ni a acabar con las miles de escuelas que estaba construyendo. Y el pantano de mi pueblo lo construyó e inauguró Franco, como otros muchos proyectos republicanos.
Por cierto, tengo que repetir aquí que el generalísimo se equivocó de botón al inaugurar el pantano de mi pueblo. No le dio con el dedo al de bajar las compuertas, sino al de encender las luces de la presa. Así que ahí tenemos al dictador con la euforia luminosa y a pleno sol. E inaugurando dos veces en dos minutos el mismo pantano.
La dictadura franquista se apropió también de la gente. Unos se dejaron y otros no pudieron oponerse porque estaban ya muertos. Entre esto últimos hay que contar con don Miguel de Unamuno, que después de dimes y diretes, fue enterrado con honores falangistas. Vivir para ver, hubiera dicho el Rector.
Unamuno, como todos los escritores de la Generación del 98 menos los hermanos Machado, era enemigo acérrimo de la copla. La copla, un género popular español tan lleno de pasiones y del que no se conoce muy bien su origen fue fagocitada también por los propagandistas del franquismo.
Mal hecho porque la copla caminó sola primero de la mano de Pastora Imperio, y luego fue más bien republicana si recordamos a  “María de la O”, “El día que nacía yo”, “Suspiros de España”, “Ojos verdes”,  “La bien pagá”, o “En las cruces de mi reja”, por poner unos ejemplos.
Y hay un claro desacierto al identificar a la copla con Andalucía. Hay autores como Quintero que era de Ceuta, Ochaita de Guadalajara, Solano de Cáceres. Y si vamos a las voces, tenemos a Concha Piquer (la musa del régimen) nacida y criada en Valencia; Angelillo, de Madrid; Imperio Argentina, de Buenos Aires; Raquel Meller, de Tarazona; Rosita Ferrer, de Barcelona. No se puede achacar a la casualidad que los ideólogos culturales del régimen pensasen llegar por todos los medios a una España andalucista.
Por eso hicieron con el flamenco lo mismo que con la copla, obviando que Carmen Amaya era catalana, o Antonio Gades (Antonio Esteve) era de Alicante; o que Rafael Farina se crió en Los Pizarrales de Salamanca, después de nacer en un pajar del Martinamor, unos cuantos kilómetros dentro de la misma provincia.
La copla y el flamenco se rozan, pero no son lo mismo. El origen del flamenco parece cercano a un mestizaje morisco. Y tampoco es lo mismo que el llamado cante jondo (hondo) de quien Manuel de Falla decía que era más antiguo que el flamenco.
Ahora Estrella Morente ha grabado un disco de copla. Hace bien, flamenca de postín por parte de padre y madre, ha reinado en el flamenco hasta ahora. La inquietud le llevó a su padre -Enrique Morente- a buscar nuevas fórmulas de expresión dentro del flamenco, mientras que otros como José Menese se han muerto sin apartarse de su pureza.
Esa misma inquietud ha empujado a Estrella a la copla.  Estrella no añade nada a este género, aunque no pierde la dignidad de una intérprete prodigiosa. Pero “aflamenca” la copla. Y está bien que lo intente, aunque para eso haya tenido que huir de las clásicas (“Cinco farolas”, “Y sin embargo te quiero” “Ojos verdes”, y alguna más).
Cuando hace unos años asistimos a la trifulca entre Rocío Jurado y Concha Márquez Piquer porque la primera había dicho (al ser preguntada por la Piquer) que ella era más larga, Rocío tenía razón aunque la hija de la tonadillera y del torero rubio, que estaba casado con otra, se pusiese como se puso. Porque Rocío Jurado cantaba tan bien la copla como el flamenco, incluso como la balada.
De esto doy fe, porque la escuché junto a su primer marido con quien departimos el tiempo de los exilados que un día volvimos.
Y conmigo, toda España.
Tanto la copla como el flamenco tienen unos cimientos literarios. Y ahí sí que no pueden saltarse las reglas. La poesía popular -tan olvidada- es muy agradecida pero muy exigente.
Digamos que desde este ángulo, la copla es para Rafael de León, devoto de Miguel de Molina; y que el flamenco lo dejamos para Federico García Lorca, más cercano a Manuel Torre y Tomás Pavón.
Las dos seducciones se fusionan en dos poetas actuales: Miguel Ángel Yusta,  a quien debemos cientos de coplas y que tiene un espacio semanal en el “Heraldo de Aragón” para dar vida a esta poética, y Manuel López Azorín, que enlaza con el anterior a través del romance (con guiños a la seguidilla) en su libro “Romancero flamenco”.
Ni en la literatura ni en la música se puede poner de rodillas en el  olvido aquello que es tan importante que nadie sabe de dónde viene. Y es porque viene del pueblo.

viernes, 13 de septiembre de 2019

sábado, 7 de septiembre de 2019

Rincón de la copla. Sept. 2019

Siempre que me voy de ti
me cuesta decirte adiós,
porque estás grabada, Soria,
dentro de mi corazón.

Durante una semana del mes de agosto se celebra en la ciudad de Soria un certamen exclusivamente dedicado a la Poesía, que ya va por su duodécima edición. Está apoyado con entusiasmo por la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento y el soporte de diversas entidades sorianas. Asisten, cada vez en más número, autores y editores tanto de España como de países hispanoamericanos. El ambiente en la bella ciudad vecina es muy especial y ya va por el séptimo año que acudimos puntuales a una cita donde la poesía se funde con la amistad, la música y, por qué no decirlo, la afamada gastronomía de la ciudad del Duero, lo que unido a sus numerosas bellezas naturales y monumentales hace especialmente grata la estancia. De ahí la nostalgia en la despedida...



Un caballo bebe solo
lluvia y sangre sin consuelo.
La negra noche es más negra
porque está solo, sin dueño.

Blas Muñoz Pizarro (Valencia, 1943), es profesor de Latín y licenciado en Filología Hispánica. En 1971 obtuvo el “Premio Nacional de Poesía José Antonio Torres”. En 1975 fue incluido en la antología Un siglo de poesía en Valencia, de R. Bellveser. Publicó en 1981 Naufragio de Narciso
[1971-1973] becado por el Ayuntamiento de Valencia. Ha permanecido luego en
silencio poético hasta el año 2007. En estos últimos años ha sido reconocido con más de una veintena de galardones nacionales e internacionales, entre ellos el “Premio de Poesía Miguel Labordeta 2010” del Gobierno de Aragón.
En una reciente conversación, me comenta que a los quince años escribió, dentro de un relato,esta copla de reminiscencias lorquianas que no me resisto a reproducir.



Palomita palomita
cuidado con el pichón.
Mira que rondando el nido
está el gavilán ladrón.

La copla de hoy pertenece a Los Gavilanes, una de las más famosas zarzuelas de nuestro rico repertorio lírico. Compuesta por el maestro Jacinto Guerrero, se estrenó en el Teatro de la Zarzuela en el año 1923. En esa época era muy corriente, dada la fama internacional de nuestra jota, incluírla en los libretos de numerosas zarzuelas, muchas de ellas con ambiente aragonés (La Dolores, Gigantes y cabezudos...). Fue una época dorada que se está recuperando para las nuevas generaciones. La Zarzuela constituye un patrimonio cultural y musical inmenso que estamos obligados a preservar y difundir con el respeto y calidad debidos, pues ciertas “actualizaciones” desvirtúan las obras originales que constituyen un valioso documento del lenguaje, costumbres y modos de la época.


La copla es bella, potente,
directa e inigualable;
mana desde el corazón
y de allí al alma se expande.

La copla como estrofa poética, la cuarteta octosílaba asonantada, ha sido a través de toda la literatura española motivo de hermosas composiciones. Es preciso, empero, distinguir la copla estrofa de la copla como canción española que surgió a finales de los años veinte del pasado siglo y tuvo su mayor esplendor hasta los años sesenta. Hoy sigue vigente, resistiendo al tiempo, con nuevas letras e intérpretes. A propósito cito la impresionante obra, tesis doctoral de Ana María Martín Villegas (Institución Fernando el Católico, 2019), que en un estudio exhaustivo y brillante recoge el recorrido histórico de las canciones -coplas- populares españolas, con abundante documentación. Un trabajo ímprobo e indispensable con prólogo de Agustín Sánchez Vidal.



El querer que por ti siento
es luz que la noche roba,
alma tras unos barrotes
que se pudre triste y sola.

En el extenso prólogo de la obra del poeta y flamencólogo José María Lopera, Gonzalo Rojo recoge la interesante información referente a que, en los siglos XIX y XX, se editaron importantes colecciones de coplas, bien en recopilaciones (Demófilo, Rodríguez Marín) como en colecciones sueltas o formando parte de otras publicaciones (novelas, ensayos, artículos etc.), destacando entre sus autores Fernán Caballero, Augusto Ferrrán, G.A. Bécquer, Manuel Balmaseda, Salvador Rueda, J.R. Jiménez, Antonio y Manuel Machado, José Bergamín, Rafael Montesinos y muchos más. Vemos pues que la copla ha tenido autores de renombre y calidad a su servicio, lo cual nos fortalece en el ánimo de seguir batallando por su pervivencia. La de hoy es del citado José María Lopera.


(Heraldo de Aragón: 1,8,15,22 y 29 sept. 2019)








sábado, 3 de agosto de 2019

Rincón de la copla. Agosto 2019

Somos destello de luz
que en un instante se pierde,
pero el amor verdadero
sobre la luz prevalece.


Coplas de amor, coplas llenas de sentimientos que nunca pasan de moda, aunque a diversos poetas de vanguardias varias les parezca que el amor, en poesía, no es sino un resto de romanticismo trasnochado y epígono beckeriano. Pero lo cierto es que siempre que haya dos personas cautivas del amor -o del enamoramiento, que no suele ser lo mismo- habrá poesía y su expresión será desarrollada en cualquiera de las formas que la contienen. Y una de las formas estróficas llenas de belleza es la copla, nuestra genuina expresión poética, inmortal, renovada y revitalizada con las nuevas aportaciones que periódicamente le acarrean los poetas, los copleros (nunca esta expresión ha sido tan digna y bella) y quienes las leen, las cantan y las publican.






¿A dónde vas luna blanca
por esa senda de flores? 
-Busco a uno que me ama
por las sombras de la noche.



Juan Ramón Jiménez (1881-1958), dejó una ingente obra en versos de arte menor inéditos. Con este título, “Arte Menor”, se publicó (Ed. Linteo) en 2011 un precioso volumen que recoge, con edición crítica, introducción y notas de José Antonio Expósito Hernández, estos poemas, creados en 1909 y que no habían visto la luz. Cinco partes componen el libro, bellamente editado: Cancioncillas, El jardinero sentimental, Quinta cuerda, Música en la sombra y Los rincones plácidos. En ellas y a través de ciento cuarenta y dos poemas se va desgranando la especial sensibilidad y exquisitez del poeta moguereño, Premio Nobel de Literatura en 1956 y que con esos breves versos -que intentó publicar, sin éxito, en su tiempo- construye un delicado monumento a la mejor Poesía.



 Cierra la puerta a los vientos
que desatan las tormentas
no vaya a ser que se lleven
tus rosas de primavera

Transcurre el mes de agosto, tiempo de vacaciones (no para todos) y molicie (tampoco para todos).
Vivimos una época llena de tensiones de todo tipo, en el ámbito nacional, entre los amigos que de repente ya no lo son, en las familias... La sociedad en general tiende a estar en esa situación que es más acusada cada vez sin que sepamos, a ciencia cierta, el porqué. Los niños y los ancianos, en especial estos últimos, consumida ya casi toda su ración de vida, son las victimas más vulnerables. Leemos y escuchamos muchas opiniones al respecto pero las soluciones no llegan. A veces buscamos refugio en el silencio y la soledad y nos aislamos de tanta batalla exterior. ¿Es la mejor solución? Difícil respuesta...



De tal manera te amo
que aunque mis días se acaben
nunca moriré del todo
para no dejar de amarte.


En el amor no hay medida, Ya decía San Agustín que la medida del amor es amar sin medida. No obstante esta época nuestra, mala o buena para la lírica (no podríamos afirmarlo con rotundidad) ha traído una cierta devaluación y provisionalidad en el amor, y hablo en especial de las relaciones de pareja. El lema de “usar y tirar” parece ser norma frecuente de muchas situaciones amatorias en las que las dificultades o el sacrificio personal hacen mella inmediata en la relación y cada quien se va por su nuevo camino.
Evidentemente no todo, en el amor referido a la relación de pareja, está revestido de provisionalidad y ruptura. Hay muchas parejas felices a través del tiempo, las dificultades, los hijos y las hipotecas. A ellos, nuestro cariño, respeto y enhorabuena.


(HERALDO DE ARAGÓN, 4, 11, 18 , 25 agosto 2019)


























sábado, 29 de junio de 2019

Rincón de la copla. Julio 2019



La cura que hace san Blas
es barata y muy completa:
no te pincha, no te raja
y, además, no te receta.



Me comenta mi amigo y extraordinario informador, Gabriel Fuertes, que Mercedes Pueyo es la mejor estudiosa de nuestros dances en los años cincuenta del siglo XX. Refuerza esta opinión enviándome unas impagables coplas de diversos lugares de nuestra geografía. Son coplas alusivas a tradiciones y que se refieren a los dances de Añón, Mallén, Rodén y Pina de Ebro, de donde es la que publicamos este domingo. En ellas, casi todas aconsonantadas, hay un ingenio muy especial y es de agradecer que investigadores de nuestro rico folclore aragonés estudien, cataloguen y conserven estas valiosas muestras de la tradición. Esta de Pina se cantaba en honor de San Blas, su patrono y tiene humor aragonés en estado puro además de una buena dosis de sabiduría popular.







Voy camino del silencio
con una copla en la sangre,
y mis palabras son fuego
que se consume en el aire.


Me atrevería a calificar a José María Lopera (Alcaudete, Jaen, 1929) como un digno sucesor de Demófilo y no me equivocaría. Sus publicaciones -numerosísimas- hacen de él un poeta imprescindible, sobre todo en su faceta de creación de las estrofas populares, y un investigador fundamental del folclore andaluz. Cultiva la literatura, la arqueología y la historia. Actualmente vive en Álora desde donde proyecta una intensa actividad cultural y dirige la revista literaria Álora, junto a Isabel Miguel. Habla seis idiomas y ha estudiado fenicio y tartessio. Es Caballero de la Orden del Danubio. Ha leído sus poemas en ocho países y su obra “Flamenco para cantar palo a palo” es fundamental para conocer todo ese rico acervo popular que encierra el folclore andaluz.






Como la higuera eres.
Como la higuera vieja.
Y paso, y me saludan
silencio y hojas secas.


Miguel Hernández, nos sigue estremeciendo con sus versos llenos de un lirismo muy especial, de dolor y sangre, de impotencia ante la derrota , pero también de serenas esperanzas que no pudo, por desgracia, ver cumplidas. Todos conocemos su obra y deberíamos acercarnos a ella con frecuencia para no olvidar que la poesía es, muchas veces, un acto de sacrificio y servicio. Hace tiempo, un grupo de poetas estuvimos visitando, emocionados, su casa natal en Orihuela. Allí, en el huerto y junto a la higuera, recitamos sus versos, hicimos fotos, miramos desde su ventana el patio que él veía y acariciamos los modestos objetos que le rodearon. Orihuela es hoy una próspera población donde es venerado casi por todos el recuerdo del inmortal poeta.






Si estáis haciendo el Camino
parad en Casa Varela:
hallaréis grata acogida,
trato amable y buena mesa.


Jaca, y su importancia como punto del Camino de Santiago, con tan hermosa revitalización en las últimas décadas ,es un lugar de referencia para cualquier aragonés. Muchos hemos pasado allí unos años imborrables en nuestra memoria y el Pirineo nos ha marcado desde muy jóvenes. La nieve en invierno, las excursiones en verano y el encanto del paisaje en cualquier tiempo, son atractivo más que suficiente para “subir” a dar una vuelta al corazón de Aragón o pasar allí una buena temporada. Me van a permitir hoy mis lectores que vuelva a citar a este establecimiento, con cuyos amables dueños, ya amigos, conservo la amistad a través de los años, a pesar de las últimas ausencias tan prolongadas . Y es que, en Aragón, somos así. Saludos a todos mis amigos jacetanos.


(Heraldo de Aragón, 7, 14, 21 y 28 de julio de 2019






























viernes, 7 de junio de 2019

Fleta y la jota.

Tanto en Jota tradicional, como en las incluídas en Zarzuelas y las de Falla, Miguel Fleta cantó magistralmente la Jota aragonesa. Afortunadamente nos quedan sus grabaciones.

miércoles, 5 de junio de 2019

Rincón de la copla. Junio 2019


Están clavadas dos cruces
en el Monte del Olvido
por dos amores que han muerto
que son el tuyo y el mío...


Carmelo Larrea (Bilbao, 1908- Madrid, 1980) compuso -entre otras muchas famosas- esta canción, (Dos cruces) una de las más populares de la músca de posguerra española y que inicialmente tituló Soledad. Se han hecho más de ochenta versiones, siendo traducida a numerosas lenguas extranjeras, y también ha sido banda sonora de cinco películas. Se ha interpretado, entre otros, por María Dolores Pradera, Miguel de Molina, Los Sabandeños, Antonio Molina, Juanito Segarra, Los Panchos... Larrea fue un inspiradísimo compositor popular y traemos aquí un fragmento de esta popularísima “Dos cruces”, cuyo sentido ha sido tantas veces emulado por numerosos poetas en alguno de sus versos. Siempre los dos amores, “el tuyo y el mío”, navegando por el mar del éxtasis, los celos, el olvido. Ay, el amor o su ausencia, el desamor, motor constante de nuestras vidas...






Mi querer y tu querer
son dos quereres en uno;
y siempre estamos riñendo
por si es mío por si es tuyo.


Augusto Ferrán, nace y muere en Madrid (1835-1880).Tiene ascendencia aragonesa y catalana. Vivió bastante tiempo en París y fue amigo de Gustavo Adolfo Bécquer, con quien posee grandes puntos de coincidencia en su obra. La poesía de Ferrán es afín a la del maestro sevillano y muestra gran influencia de la poesía popular andaluza. Cantares populares y originales se reproducen en su libro “La Soledad” (1861), que contiene hermosas coplas, que tratan del amor, la soledad, el paso del tiempo, las diferencias de clases y hasta la angustia existencial. Hoy, y siguiendo con el muy utilizado tema de los dos corazones, el amor (el tuyo y el mío), el olvido y todo lo demás, nos aparece la copla de Ferrán, ya publicada hace siglo y medio y que traemos al Ríncón





No quiere morir la tarde
y enseña sus flores blancas
pero al mirarse en un pozo
estrellas y luna mandan.


Juana Vázquez Marín, extremeña de Salvaleón (Badajoz), reside desde sus tiempos de estudiante en Madrid, donde ha desarollado su vida y carrera. Es doctora en Filología y licenciada en Periodismo, catedrática de literatura y excelente y reconocida poeta , novelista y ensayista. Autora infatigable, tiene gran actividad en los círculos literarios madrileños y entre su extensa obra destaca el ensayo “El Madrid cotidiano del Siglo XVIII”, un interesante trabajo sobre la sociedad y la vida de la época en la capital de España que aporta una abundante documentación y anecdotario y ha sido reeditado recientemente. Amiga nuestra, le pedimos una copla y he aquí una, micropema para ejemplo de la versatilidad de nuestra bella estrofa.






Qué genialidad, qué empaque
qué grandes estos poetas
que hacen arte de la copla
y de la amistad, poema.


Hoy voy a confesarles un pequeño secreto. Varios amigos de aquí y de allá, poetas consagrados y laureados, no hacen remilgos a la composición de coplas y romances y, como buen ejercicio, hasta se comunican por escrito en octosílabos, para solaz y regocijo de ellos mismos. Es costumbre inveterada y saludable, que agudiza el ingenio y ha sido, muchas veces y en diversas épocas, puesta en práctica por grupos de amigos especialmente relacionados con el verso. La copla es, pues, excelente vehículo de comunicación y sano ejercicio de lenguaje, al par que divertimento en muchos casos. Ante la invasión de fórmulas poéticas y palabras foráneas, rompemos una lanza, como desde hace tantos años, por la preservación de una de nuestras bellas y tradicionales estrofas.






A comer y buena siesta
que es cosa muy natural,
como dijo don Camilo,
con pijama y orinal.


Y termina, con el mes de junio, la temporada y el curso escolar. Comienzo de vacaciones, ilusión en los más pequeños y estrés en los mayores, padres y madres, cuando se abre una época de convivencia más intensa y, por ello, más arriesgada para las relaciones familiares. Una vez conseguido el merecido asueto, disfrutemos y hagamos de las vacaciones un tiempo de reflexión, descanso , paseos y, por qué no, lectura. Vayan bien provistos de buenos libros y, si es posible, uno de ellos de poesía... Que el verano les sea propicio, amigos de este Rincón, y aquí les ofrecemos una desenfadada copla basada en un famoso dicho de nuestro Premio Nobel, Camilo José Cela, y que también incluía un Padrenuestro, que lo sepan... 

(Heraldo de Aragón, 2,9,16,,23,30 junio 2019)

sábado, 1 de junio de 2019

Un recuerdo: Primer Centenario de Heraldo de Aragón.

Página publicada en el ejemplar conmemoratido del Primer Centenario de Heraldo de Aragón (23 septiembre 1995)

martes, 7 de mayo de 2019

Rincón de la copla. Mayo 2019





Culta o popular, es grande
esta celebrada estrofa.
No hay nada más que decir:
¡Viva por siempre la copla!


Y como hemos terminado hace unos días un mes de abril muy movidito, pues quiero abrir el Rincón en mayo con un homenaje a la copla. La copla va ganando de nuevo terreno en la expresión de los poetas, a pesar de las vanguardias raperas, youtuberas y demás. Y es que nuestras estrofas tradicionales (copla, soleá, seguidilla, etc.) siguen reinando pese a quien pese. Lo que algunos autores llaman hayku, tal y como ellos lo escriben no es sino una coda flamenca o bordón, (tres versos de cinco, siete y cinco sílabas, rimando en asonante el primero y el tercero, que acompañan a las seguidillas). No es por desilusionar, a los numerosos poetas que cultivan el hayku, (yo mismo tengo un libro publicado al respecto) pero en vez de experimentos, es bueno seguir cultivando, sin disfrazarlas, nuestras seculares estrofas que, por cierto, son más antiguas que la del sol naciente...




El agua, cual gota en piedra
deja señal indeleble
lo mismo que los amigos
que en el corazón se tienen.


Avanzamos por el mes de mayo, a través de una primavera muy variable pero que, definitivamente, se va estableciendo en la Naturaleza, renovando paisajes en el anual renacimiento. También es buena época para los poetas y los escritores en general, con la efervescencia de las diversas Ferias del Libro donde se exponen los últimos trabajos. En Aragón son cada año más numerosas y concurridas, lo cual es buen signo de aumento de lectores. Pero algunas veces, las prisas por editar esa “obra impactante” que va a consagrar por fin una vida literaria, son absolutas, sin apercibirnos de que, en unos años, seguramente se habrá apoderado el olvido de muchos proyectos ilusionados. Cosas de la vida. Por eso la copla de hoy es un canto a la amistad verdadera, la generosa, la que deja huella indeleble, duradera, y constituye uno de los mayores tesoros de nuestra trayectoria vital.





Bendita la soleá
que el corazón emociona
con sentido y claridad.


Es muy raro que, en esta veterana sección, nos salgamos de la cuarteta como expresión coplera,. Pero no hay que olvidar, como ya decíamos hace unas semanas en este mismo espacio, otras bellas estrofas del idioma español en las que, durante siglos, numerosos y famosos autores y muchos más (hoy en el feliz anonimato que profetizó Demófilo, el padre de los Machado), han expresado, de manera culta o popular su pensamiento poético. Las más conocidas son la “soleá”, estrofa popular andaluza, que es considerada como uno de los grandes cantes flamencos y es también denominada como “terceto gallego”, y la “seguidilla”( tan imitada en estas tierras en su coda final, bajo la forma de falso Hayku). De la primera, traemos hoy un sencillo ejemplo.




Tras el aire discreto
de tu abanico
pensamientos escondes
que no adivino.
Si lo supiese
como un dios yo sería,
niña de nieve.


Como prometimos la pasada semana, traemos hoy a este espacio una seguidilla compuesta, (siete versos: 7-,5a ,7-,5a, 5b, 7-, 5b), publicada en el libro Damas, que dimos a la luz conjuntamente en 2017 y en que, este que escribe, glosaba cincuenta retratos de mujer realizados por el gran pintor e ilustrador Alberto Calvo (Supermaño en su alter ego) de sobras conocido por sus tiras cómicas con temas de actualidad y sus hilarantes personajes característicos y compañero en estas páginas del Heraldo hace ya muchos años. Todos los retratos iban acompañados de estrofas populares que intentaban glosar, sin solapar, las estupendas ilustraciones de Alberto. Como ejemplo, publicamos hoy esta seguidilla que subraya una de las inquietantes y sofisticadas “damas” del enorme artista aragonés.


Heraldo de Aragón, 5, 12, 19 y 26 de mayo de 2019

viernes, 19 de abril de 2019

PREMIO "BÚHO 2019"





Emocionado, y agradecido a la Asociación Aragonesa de Amigos del Libro, por este prestigioso y veterano Premio, ya en su XXVII edición, junto a tan grandes figuras de la cultura aragonesa.
"Miguel Ángel Yusta, poeta, musicólogo y activista cultural Premio Búho por toda su obra, en especial la dedicada a la copla, y su apoyo entusiasta a la difusion de los poetas aragoneses". 

(Acta de la concesión)

Rincón de la copla. Abril 2019


Si se abandonan los pueblos
y no les dais esperanza
se morirá sin remedio
toda la esencia de España.


El pasado día treinta y uno de marzo, decenas de miles de habitantes de la “España vaciada”, se manifestaron en Madrid. La iniciativa partió de “Teruel Existe” y fue secundada por “Soria Ya” y más de noventa organizaciones de veinticuatro provincias afectadas por la terrible despoblación, que reclamaron igualdad y que los gobiernos, en aplicación del Artículo 130 de la vigente Constitución, atiendan sus justas peticiones. La despoblación, falta de servicios, comunicaciones, enseñanza y sanidad hacen de esta que parte de nuestro país y sus habitantes, estén claramente discriminados y en situación de semiabandono.No es posible que sigan siendo unos héroes de la supervivencia. Teruel, sus comarcas, son un triste ejemplo de desatención cuyas consecuencias, a medio plazo, pueden ser irreversibles. Es hora ya de poner soluciones, no palabras.





En nuestra Semana Santa
se hace plegaria la jota,
y con hachas y tambores
también reza Zaragoza.


La Semana Santa Zaragozana tiene un carácter y una belleza y solemnidad especiales. Las Cofradías han preparado durante meses sus desfiles procesionales, que llevan a cabo durante esos días. Zaragoza y Aragón, sobre todo en la ruta del tambor y el bombo, tienen unas señas de identidad especiales: sus tambores, bombos y el contrapunto dramático de los timbales, propio de algunas Cofradías como La Piedad en Zaragoza, hacen de los desfiles, junto a los bellos Pasos y la devoción de los participantes un acto de oración colectivo inigualable. La Cofradía del Descendimiento de la Cruz y Lágrimas de Niuestra Señora fue pionera ya en 1972, en incorporar la jota en su procesión, con coplas como la que publicamos, del que esto escribe, y que cantan a lo largo de su recorrido.






Se nos vacía Aragón
casa a casa, pueblo a pueblo,
monte a monte y hombre a hombre
se va quedando desierto.


Esta copla fue publicada en este Rincón de HERALDO hace más de diez años, con motivo del Día de San Jorge y con el siguiente texto: “El 23 de abril, San Jorge, Aragón celebra su Fiesta. Es el aragonés un pueblo integrador y pacífico que históricamente ha dado al común más de lo que ha recibido. De ahí que, en los albores de la democracia, este día tuviera un carácter marcadamente reivindicativo (Autonomía, no al transvase, agua, futuro, igualdad...) y actualmente, al ir logrando metas, se vaya transformando en una jornada de fiesta y exaltación aragonesa.
El aragonés es sufrido y digno y va aprendiendo las lecciones de la Historia. Por eso no baja la guardia y, aunque con alegría por lo conseguido, está acostumbrado a luchar cada logro y a vigilar para no perderlo...”
Pues eso: plena vigencia...




Culta o popular, es grande
esta celebrada estrofa.
No hay nada más que decir:
¡Viva por siempre la copla!


Y como hemos llevado un mes de abril muy movidito, pues quiero terminar el Rincón con un homenaje a la copla. La copla va ganando de nuevo terreno en la expresión de los poetas, a pesar de las vanguardias raperas, yuotuberas y demás. Y es que nuestras estrofas tradicionales (copla, soleá, seguidilla) siguen reinando pese a quien pese. Lo que algunos autores llaman hayku, tal y como ellos lo escriben no es sino una coda flamenca o bordón, (tres versos de cinco, siete y cinco sílabas, rimando en asonante el primero y el tercero, que acompañan a las seguidillas). No es por desilusionaros, amigos poetas del hayku, pero en vez de experimentos y falsos haykus, seguid cultivando, sin disfrazarlas, nuestras seculares estrofas que, por cierto, son más antiguas que la del sol naciente...

(Publicadas en Heraldo de Aragón, abril 2019)

sábado, 30 de marzo de 2019

Rincón de la copla .Marzo 2019

Al mirarse en el espejo
dijo una moza con pena:
"Envidia tengo a la jota,
que nunca se vuelve vieja".


La jota sigue muy viva, en sus facetas de canto y baile, a través de un gran número de aficionados y profesionales que la mantienen con entusiasmo.
Hace unas semanas, se ha celebrado en Huesca el "XXVIII Certamen Nacional de Jota Ciudad de Huesca" que, organizado por la Asociación Cultural "Acordanza", aúna muchos esfuerzos públicos y privados y se ha consolidado hace años como un exitoso aglutinador del mundo jotero y en el que en esta edición han concurrido más de trescientos participantes.
La gran calidad de los intérpretes y el entusiasmo del numeroso público asistente han sido la tónica de este evento, ya consolidado hace tiempo como uno de los más importantes y concurridos.
Traemos al Rincón una de las cantas que se han interpretado en este Certamen.




Te quiero porque te quiero
y tú sabes que es verdad;
que en el amor no hay razones
porque el amor es...amar.


Son cuatro versos, treinta y dos sílabas: solamente eso, una copla. Pero esta copla y parecidas es muy posible que rindan más de un corazón. Y es que, como decía el poeta Gabriel Celaya ya en mil novecientos cincuenta y cinco y cantó el querido Paco Ibañez unos años después, la poesía es un arma cargada de futuro, sí, pero además de futuro, su carga puede ser de esperanza, reivindicación, dolor, y sobre todo amor, que desde tiempos inmemoriales ha sido vehículo de expresión de bellos pensamientos que los amantes se dispensan. Nunca morirá la poesía amorosa, por mucho que algunas “vanguardias” la detesten. Y como va llegando la primavera, que es tiempo de amor y de poetas, ahí queda esa razonable sinrazón del amor, que matiza los malos momentos de la vida.




Dos clases de amores hay
y son amores distintos:
uno, el que se tienen todos;
otro es el tuyo y el mío


Pues como seguimos esperando la primavera, las coplas fluyen como el agua desde las nieves de nuestro amado Pirineo o de las fuentes que nutren el Guadalaviar y el Tajo, allá por Teruel. Por cierto, que ya es tiempo de acercarse hasta esos lugares y contemplar cómo se va abriendo paso poco a poco la nueva vida entre lo que parecía ya muerto en el largo invierno. Animo a que mis amables lectores sustituyan la tradicional astenia primaveral -que va a llegar de un momento a otro- por una buena excursión a pie por esos senderos del Pirineo o de la Sierra de Albarracín y que ventile los pulmones y se lleve la herrumbre del reposo invernal. Además, pienso que será una buena terapia anticrisis si, al par que caminan, van canturreando alguna jotica de este Rincón...




Un beso te di de noche
y varios de madrugada
para que no se te olvide
lo que yo te quiero, maña.


Termina – y con qué rapidez- este mes de marzo, preludio de uno de abril que promete ser agitado y que ojalá nos traiga el acuerdo entre todos, para seguir disfrutando de unas condiciones de vida que, con todos los inconvenientes, ya hubiesen querido nuesrtros abuelos. El calendario nos ha traído la primavera, tiempo de poetas, muchos de los cuales ya empiezan a aficionarse a estas modestas estrofas que llamamos coplas. Hoy cerramos el mes con una copla de amor, ya añosa en nuestros cuadernos. Me ha parecido bella y oportuna y tiene un bonito aire de jota antigua, de esas que cantaban en las rondas nocturnas aquellos buenos joteros en las Fiestas del Pilar de hace ya algunos años y que con tanto cariño recordamos...


Heraldo de Aragón, 10, 17, 14 y 31 de marzo de 2019

martes, 12 de marzo de 2019

Premios Búho

 Emocionado, y agradecido a la Asociación Aragonesa de Amigos del Libro, por este prestigioso y veterano (27 edición) Premio, junto a tan grandes figuras de las Letras aragonesas.
"Miguel Ángel Yusta, poeta, musicólogo y activista cultural Premio Búho por toda su obra, en especial la dedicada a la copla, y su apoyo entusiasta a la difusion de los poetas aragoneses".


martes, 5 de febrero de 2019

Rncón de coplas Heraldo de Aragón. Febr.2019


3 feb.

Cuando se canta una jota
se estremece el corazón
relumbra el sol en los ojos
y vuela el alma en la voz.



Pasado San Valero, vamos entrando de lleno en el nuevo año (¿Quién se acuerda ya de los buenos deseos y propósitos de hace tan sólo unas fechas?). Sin casi darnos cuenta llegará de nuevo la primavera y ojalá sea luminosa y renovadora. Hoy, con esta copla jotera, rendimos un sencillo homenaje a nuestra jota que, por fortuna, sigue muy viva en grandes voces y bailadores actuales, en la estupenda Fonoteca de la Jota sita en la Biblioteca de Aragón y, sobre todo, en el corazón de todos los aragoneses que la cuidan y proclaman.



 10 feb. 19

Ojos de noche sin luna
van navegando a mi lado
y se quedan en silencio
como el mar en el ocaso.


Unos ojos, la luna, el mar, el silencio, el ocaso... He ahí unos cuantos ingredientes con los que los poetas suelen aderezar sus versos. O no, como diría aquél, pues muchos de ellos pensarán que son lugares comunes muy trillados ya por los vates de todas las épocas. Pero en esto, como en la buena cocina, la eficaz mezcla y dosificación, aún con iguales ingredientes, pueden hacer un guiso distinto y apetitoso. La poesía se cocina de muy diversas maneras y tanto la métrica tradicional ( inexcusable escuela ) como el verso libre, al que debería accederse, como los buenos pintores abstractos, tras el necesario aprendizaje académico, son platos que, bien cocinados, dan resultados buenos. La copla de hoy mezcla esos ingredientes tradicionales y se los da a probar..





17 feb. 2019


Por la calle donde vives
camino siempre en silencio
porque cerca de tu casa
musita tu nombre el cierzo.


Vamos caminando por este mes de febrero en el que, según el refranero, “busca la sombra el perro”. Lo que pasa es que, en nuestra bendita tierra no nos podemos fiar, pues el viento propio, el cierzo, juega malas pasadas y hace que caminemos un poco encogidos para evitarlo mejor (dicen que por eso los hermanos de Huesca nos llaman “Cheposos” a los zaragozanos...). En todo caso el sol ya va cambiando claramente su camino, hacia el solsticio, invadiendo las umbrías poco a poco y anunciando que inevitablemente y por fortuna, tras el invierno ha de llegar una nueva primavera, un ciclo que año tras año va dejando su huella en nuestros paisajes. Ojalá que lo sea también en nuestras vidas y renovemos los buenos propósitos para recibirla mejor.




24 feb. 2019


En tus ojos encendidos
vuelan miles de palomas
y bordan arte tus manos
cuando bailas una jota.



Dedicamos en esta sección muchos comentarios a la copla, a la jota cantada, con la esperanza y deseo de una renovación de las cantas y de que los cantadores y cantadoras adopten con cariño algunas de ellas y las difundan. Hoy, queremos dedicar una copla a los bailadores, a esas parejas maravillosas que hacen arte del difícil y variado conjunto de estilos de baile de la jota atagonesa. Asombro fue de muchas geografías, hace pocos años, ese arte impar y extraordinario, con figuras como Isabel Zapata o su hijo Andrés Cester que, como muchos otros, están en la mente de todos los buenos aficionados a la jota. Un patrimonio cultural que debemos cuidar, proteger y difundir sin complejos.