sábado, 30 de marzo de 2024

Rincón de la copla XXIII Anivº. Marzo 2024.

Siempre a la orilla del Ebro

me acerco para soñar

montañas llenas de nieve,

llanuras llenas de pan.

 

El uso y aprovechamiento del agua ha sido un tema recurrente en las reivindicaciones de Aragón. Los secanos aragoneses tienen sed y algunos pueblos, incluso muy cercanos al Ebro, ya no recuerdan desde cuando son abastecidos, cuando la sequía aprieta, con camiones cisterna. Desde fuera se nos acusa de insolidarios y hubo quien nos describió aferrados a un botijo, como símbolo de nuestra postura egoísta con el reparto del agua. Es muy fácil hacer demagogia y también lo es observar los problemas sobre el terreno. Los aragoneses no somos tacaños, sino austeros, que son cosas muy distintas.Y aunque seamos pocos no nos gusta que se nos ningunee. Hay capacidad, si la determinación acompaña, para hacer valer y defender los derechos de los más desfavorecidos.


 

Para cabezudo el Ebro

para gigante, el Pilar:

este porque toca el cielo,

aquél por irse hacia el mar...

Hay unos cuantas referencias que salpican muchas de las letras o cantas de las jotas aragonesas. Son motivos que se repiten porque constituyen señas de identidad. Tales son la Virgen del Pilar o su templo, El Pilar, que inevitablemente se asocia con el Ebro, el río más largo de España, con novecientos diez kilómetros de recorrido y que parece ser que surgió hace muchos millones de años por las causas que el lector curioso podrá ampliar en diversas fuentes. Pero en la ribera navarra y aragonesa es especialmente querido y desde luego en Aragón, junto con el Pilar, emblema que nos significa y al que, junto a los Pirineos y al Moncayo, extremos de nuestro territorio, dedicamos apasionadas y bellas jotas. Hoy rescatamos una de nuestros cancioneros.



La jota es canto, coraje,

emoción, brío, grandeza,

sentimiento, corazón,

oración y fortaleza.

Y qué verdad es que nuestra querida jota aragonesa, tan cosmopolita y arraigada, tan hermosamente cantada y bailada, desde sus inicios populares, que son su raíz permanente, creció, se expandió por Europa y América y ha merecido la atención de los más famosos compositores, que la llevaron a sus partituras extendiendo su fama por todo el mundo. La jota aragonesa bailada también por famosos ballets, presente y aclamada en la zarzuela, nuestro género lírico genuino, grande en su diversidad, es la criatura musical aragonesa más señalada, a la que debemos mantener joven y bella y amarla como nuestro más importante patrimonio musical. Y también alimentarla para que crezca sana con nuevas generaciones que hagan de ella motivo de orgullo.

 

 En nuestra Semana Santa

se hace plegaria la jota

y entre cirios y tambores

reza también Zaragoza.

Hoy, Domingo de Ramos, es el inicio de la Semana Santa. Son días de recogimiento o vacación según las creencias o criterios que libremente tenemos los ciudadanos de este país, pero es innegable la transcendencia que en la vida de las ciudades tienen las conmemoraciones propias de estas fechas en forma de desfiles procesionales con hermosas y valiosas imágenes paseadas con devoción por las diversas cofradías. En Zaragoza, además, hay varias de ellas que han adoptado la jota a modo de plegaria. La de El Descendimiento de la Cruz y Lágrimas de Nuestra Señora fue la precursora y ahora se unen varias, entre ellas la de Nuestra Señora de la Piedad y, cada vez más, se canta con devoción tal y como se hace por tierras del sur con las saetas.

 

Soy poesía y te canto

con la voz y la palabra,

que la copla es mi canción

y mi poema del alma.

Hoy se acaba la Semana Santa y el regreso a la normalidad se produce tras la agitación devocional o viajera de estos días pasados. ¿Quién se acuerda ya de la pandemia? Ahora además de reincorporarnos al trabajo, tenemos cada vez más cerca el horizonte de las vacaciones de verano. Es hermosa la vida cuando hay salud, paz, ilusion y prosperidad para todos. Pero no podemos alejarnos del dolor y las guerras, del sufrimiento de tantos y procurar ser solidarios y sobre todo valorar la paz y cuidarla. Estamos hace tiempo muy excitados por diversas causas y, sin que sirvan estas líneas de "sermón de Pascua", hacemos votos por la concordia y convivencia. La poesía "de líneas claras",como dice Luis Alberto de Cuenca, también puede ayudar, y mucho, a ello.

 

(Heraldo de Aragón, 3,10,17,24,31 marzo 2024)





























No hay comentarios: