domingo, 2 de marzo de 2025

Rincón de la copla. Año XXIV. Marzo 2025. Nums. 1.208, 1.209, 1210, 1.211, 1.212

 


La jota que lleva el viento

es el alma aragonesa

que pregona por el mundo

el tesón y la nobleza.

Estamos, sin lugar a dudas, en plena efervescencia de una nueva época dorada de la jota aragonesa. Toda su belleza y sus variadas formas son estudiadas y expresadas con intensidad por músicos, cantadores, letristas e investigadores que, por distintos caminos, han de converger en un horizonte final: la meta, que no es sino la de conseguir que la más importante manifestación del folclore aragonés sea declarada Patrimonio Inmateriald e la Humanidad. Para ello es más necesario que nunca sumar esfuerzos. La unión para lograr el objetivo final es precisa, dejando aparte individualismos y diferencias que no consiguen sino dilapidar ese inmenso caudal que debemos administrar sabiamente para conseguir tan hermoso fin. A ello, con ilusión y generosidad


Son tus quereres, mañica,

como las alas del Cierzo

y mi corazón la vela

que se llena de tu viento.

La copla, la cuarteta, corazón y expresión cantada de la jota aragonesa, ofrece un gran número de posibilidades para expresar en cuatro versos de ocho sílabas, asonantadas las pares, tanto los más bellos pensamientos amorosos, como el apego al paisaje, a las gentes, a nuestras costumbres y, cómo no, a nuestros mas genuinos símbolos aragoneses, como son nuestro querido Pilar, el Ebro, el Pirineo o esa tierra de Teruel a veces tan olvidada y todavía por descubrir en muchos aspectos. No nos olvidemos de este Aragón "de cintura para abajo", como lo definía un buen amigo mío y gran periodista, pues nos ofrece grandes sorpresas en sus variados paisajes, gentes luchadoras y localidades que pugnan por sobrevivir frente a la despoblación y el olvido.

 

 Grande como el mismo sol

es la jota de esta tierra;

si en amor luce sus iris

lanza rayos en la guerra.

La jota aragonesa ha ocupado un lugar preferente en la lírica española. Son numerosas las obras líricas -preferentemente zarzuelas- que la incorporan y que están en la mente de todos los buenos aficionados. Ambos géneros, el lírico español y la jota se beneficiaron de esta concurrencia sobre todo en la época dorada de la zarzuela, a finales del siglo XIX y primeras décadas del XX. El lector curioso podrá investigar con facilidad en las fuentes de la Red y escuchar muchas de estas obras que hoy son verdaderos tesoros musicales. Y es que en tiempos del omnipresente e imprescindible Internet puede y debe haber espacio para búsquedas y escuchas interesantes, como la de esta copla del acto I escena V de la ópera La Dolores, del maestro Tomás Bretón.

 

 Quiero a la tierra amarilla

Que baña el Ebro lodoso:

Quiero el Pilar azuloso

De Lanuza y de Padilla.

José Julián Martí Pérez (José Martí) nació en La Habana, de padres españoles en 1853 y murió en 1895 en Río Cauto. El considerado padre de la patria cubana, permaneció en Zaragoza, donde estudió en la Universidad de la Magdalena, desde mayo de 1873 a diciembre de 1874. En la calle de La Manifestación, nº 13, una placa recuerda su estancia y también tiene una calle entre las de Océano Pacífico y Rubén Darío. En esta Rincón recordamos al poeta Martí de los versos octosílabos y de las estrofas en cuartetas y redondillas, cuarenta y seis poemas que constituyen su colección de "Versos sencillos", de ellos ocho "Para Aragón en España" En su homenaje recordamos uno de estos últimos. ¿Pensaría el político y literato cubano en el aire de una jota aragonesa?


Si vas a Calatayud

pregunta por la Dolores,

que es una moza muy guapa

y amiga de hacer favores.

No vamos a insistir en estas breves líneas sobre el poder que la copla puede tener, también, como elemento difamador, ni sobre la universalización de ésta, famosa, que ha dado lugar a varias canciones, dos comedias, una novela, una zarzuela, una ópera y tres películas. Hay numerosas publicaciones que el lector curioso podrá consultar si desea ampliar su conocimiento sobre este fenómeno coplero. Ya en obras de Lope (Peribáñez y el comendador de Ocaña o Las coplas a Elena Osorio) o más recientemente Benavente (La malquerida) hay ejemplos de cómo una copla puede ser un arma peligrosa. Calatayud, al final, se ha visto beneficiada por la fama de la copla, que Tomás Bretón llevó también a la cumbre musical en su inmortal ópera La Dolores.

 

(Heraldo de Aragón: 2, 9, 16, 23, 30 marzo 2025)





viernes, 21 de febrero de 2025

Rincón de la copla. Año XXIV. Nums. 1.204, 1.205, 1.206, 1.207

 

Echando tierra por medio

dicen que un querer se olvida,

pero hay querer que no muere

si no le echan tierra encima.

Sixto Celorrio Guillén (Calatayud 1870- Zaragoza 1924) fue un destacado letrista de jotas y escritor de cuentos aragoneses. Sus obras "Paella aragonesa. Colección de cantares, cuentos baturros y composiciones festivas" (1901) y "Jotas. Cantares aragoneses" (1912) son sus libros más destacados de ambientación regional aragonesa. Celorrio, abogado, tuvo una destacada carrera política durante varios años en diversos destinos. Puede el lector curioso ampliar detalles biobibliográficos en obras de, entre otros, el profesor Barreiro y el periodista Juan Domínguez Lasierra, pues es una de las personalidades aragonesas más interesantes de su época y publicó coplas sobre todo en HERALDO. Tiene calles que lo recuerdan en su Calatayud natal y en Zaragoza.

 

 

 

 Cuando se murió le puse

un pañuelo por la cara

pa' que la tierra no toque

boquita que yo besara.


Esta hermosa copla, que me ha emocionado desde niño por su dramatismo, la interpretó con estilo inigualable el gran cantador de jota José Oto (Zaragoza, 1906- ibídem1961) y la dedicó a su gran amor, la jotera Felisa Galé, fallecida en 1948 a los treinta y seis años, que junto al propio José Oto y Pascuala Perié escribieron gloriosas páginas de nuestra jota cantada, en una época de oro de la más emblemática muestra de nuestro folclore aragonés. La canta es hermosa como lo fue Felisa, que también cantadora delicada y sensible, compuso algunas bellas cantas. Desde su muerte, decayó la carrera del gran jotero que está calificado como el más grande cantador de jota de todos los tiempos y a cuyo entierro acudieron decenas de miles de zaragozanos.



 

La jota es flecha lanzada

desde el corazón al cielo

y desde Aragón proyecta

su belleza al mundo entero.

 

Nuestra jota aragonesa está en vías de ser declarada Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO. Aunque el camino sea largo y no exento de dificultades, todos los esfuerzos deben estar unánimemente dirigidos a tal fin y más que nunca es necesario la concurrencia de todos los caminos para conseguir que el buen resultado final sea el lema a seguir. La unidad es tan imprescindible como el apoyo a todos quienes de una u otra manera están batallando por ello. La copla de hoy está incluida en el texto del espectáculo "Un arte llamado jota" que se presentó en nuestro Teatro Principal el pasado mes de noviembre y contemplaba la andadura de la jota, que trascendió de lo popular al cosmopolitismo a través de los grades compositores del siglo XIX.


 

Cinco sentidos tenía

y los cinco yo perdí,

porque tú me los robaste

cuando te fijaste en mí.

 

Quería dedicar hace tiempo un Rincón a mi buen amigo Alberto Gambino, que hace poco me recordó esta copla que publiqué hace muchísimos años y que tiene algún precedente, porque los cinco sentidos nos los han robado unas cuantas veces y otras tantas no ha habido manera de recuperarlos: así es el amor... Alberto, argentino de nacimiento, es autor y productor y un gran impulsor de la música en nuestra Comunidad. He tenido el placer de colaborar con el en las letras de alguna de sus producciones (Las Pilares, Flamenco diásporo II) donde da muestra de su originalidad y su particular interpretación en la concepción musical tradicional de nuestro folclore. En suma, una gran personalidad musical con una extensa trayectoria profesional y discográfica.

 

(Heraldo de Aragón, 2, 9, 16, 23 febrero 2025).




















domingo, 26 de enero de 2025

Rincón de la copla. Año XXIV. Nums. 1.200, 1.201, 1.202, 1.203

 


Echando tierra por medio

dicen que un querer se olvida,

pero hay querer que no muere

si no le echan tierra encima.


Sixto Celorrio Guillén (Calatayud 1870- Zaragoza 1924) fue un destacado letrista de jotas y escritor de cuentos aragoneses. Sus obras "Paella aragonesa. Colección de cantares, cuentos baturros y composiciones festivas" (1901) y "Jotas. Cantares aragoneses" (1912) son sus libros más destacados de ambientación regional aragonesa. Celorrio, abogado, tuvo una destacada carrera política durante varios años en diversos destinos. Puede el lector curioso ampliar detalles biobibliográficos en obras de, entre otros, el profesor Barreiro y el periodista Juan Domínguez Lasierra, pues es una de las personalidades aragonesas más interesantes de su época y publicó coplas sobre todo en HERALDO. Tiene calles que lo recuerdan en su Calatayud natal y en Zaragoza.




Cuando se murió le puse

un pañuelo por la cara

pa' que la tierra no toque

boquita que yo besara.


Esta hermosa copla, que me ha emocionado desde niño por su dramatismo, la interpretó con estilo inigualable el gran cantador de jota José Oto (Zaragoza, 1906- ibídem1961) y la dedicó a su gran amor, la jotera Felisa Galé, fallecida en 1948 a los treinta y seis años, que junto al propio José Oto y Pascuala Perié escribieron gloriosas páginas de nuestra jota cantada, en una época de oro de la más emblemática muestra de nuestro folclore aragonés. La canta es hermosa como lo fue Felisa, que también cantadora delicada y sensible, compuso algunas bellas cantas. Desde su muerte, decayó la carrera del gran jotero que está calificado como el más grande cantador de jota de todos los tiempos y a cuyo entierro acudieron decenas de miles de zaragozanos.




La jota es flecha lanzada

desde el corazón al cielo

y desde Aragón proyecta

su belleza al mundo entero.


Nuestra jota aragonesa está en vías de ser declarada Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO. Aunque el camino sea largo y no exento de dificultades, todos los esfuerzos deben estar unánimemente dirigidos a tal fin y más que nunca es necesario la concurrencia de todos los caminos para conseguir que el buen resultado final sea el lema a seguir. La unidad es tan imprescindible como el apoyo a todos quienes de una u otra manera están batallando por ello. La copla de hoy está incluida en el texto del espectáculo "Un arte llamado jota" que se presentó en nuestro Teatro Principal el pasado mes de noviembre y contemplaba la andura de la jota, que trascendió de lo popular al cosmopolitismo a través de los grades compositores del siglo XIX.

 

 

Cinco sentidos tenía

y los cinco yo perdí,

porque tú me los robaste

cuando te fijaste en mí.


Quería dedicar hace tiempo un Rincón a mi buen amigo Alberto Gambino, que hace poco me recordó esta copla que publiqué hace muchísimos años y que tiene algún precedente, porque los cinco sentidos nos los han robado unas cuantas veces y otras tantas no ha habido manera de recuperarlos: así es el amor... Alberto, argentino de nacimiento, es autor y productor y un gran impulsor de la música en nuestra Comunidad. He tenido el placer de colaborar con el en las letras de alguna de sus producciones (Las Pilares, Flamenco diásporo II) donde da muestra de su originalidad y su particular interpretación en la concepción musical tradicional de nuestro folclore. En suma, una gran personalidad musical con una extensa trayectoria profesional y discográfica.


(Heraldo de Aragón,  2,  9, 16, 23  febrero 2025)























domingo, 12 de enero de 2025

Rincón de la copla. 24 años. 1.200 números

 La sección semanal de HERALDO DE ARAGÓN, Rincón de la copla, cumple 24 años de publicación ininterrumpida y 1.200 números. Muchas gracias al prestigioso Diario y a los numerosos lectores.




jueves, 9 de enero de 2025

Espectáculo UN ARTE LLAMADO JOTA. Texto de presentación.

 


LA EMOCIÓN, EL MISTERIO, LOS SONIDOS: EL TEATRO


En este espectáculo, Un arte llamado jota, nos encontraremos con la magia, la luz, la belleza, el milagro, porque la jota es milagro que traspasa el escenario e inunda, ilumina, emociona y se proyecta, hecho música y voz, estremeciendo los corazones.


ESCUCHAD aquí la belleza, percibidla, porque es pura sinfonía de movimiento, voces, música y luz, lo que esta caja mágica estará derramando sobre vosotros.


CONMOVEOS con estas melodías ancestrales que son preciosa herencia de nuestros antepasados y que han mecido al pueblo que las erigió y también asombrado a los más grandes compositores del mundo creando la jota sinfónica y a gentes de muy diversas geografías, arrancando emociones y aplausos en todo el orbe.


SENTID el latido de los tiempos, el vibrante ritmo que es tan familiar a vuestros corazones y os hace recordar y revivir los paisajes, la montaña, la tierra, el valle, el río, los hombres y mujeres de vuestra infancia y conectar con el alma de quien os lo transmite hoy con la música, el baile, la palabra y la emoción que tiende un hilo invisible de amor que nos une.


COMPARTID los momentos mágicos en los que se fusionan tierra y canto, cielo y agua, luz y alegría, fiesta, tradición, amor al pasado y esperanza en el futuro: la evolución ya inmersa en el siglo XXI.


EMOCIONAOS definitivamente porque estamos ante la seña aragonesa más universal de nuestro ser y sentir y porque cuando escuchamos un arte llamado jota percibimos que algo se mueve en el alma.


APLAUDID con las manos y con el corazón porque así la fusión será perfecta y se elevarán juntos las voces, las músicas y vuestro aplauso, proyectando hacia el futuro un sentimiento común tan hermoso como nuestro canto: el deseo de un mundo donde reinen el amor, la paz y la armonía, porque:

La jota es flecha lanzada

desde el corazón al cielo

y desde Aragón proyecta

su belleza al mundo entero.



Comienza la magia y la belleza

EL ARTE SE LLAMA JOTA.


Miguel Ángel YUSTA

Nov. 2024

jueves, 26 de diciembre de 2024

RINCÓN DE LA COPLA. XXIV Aniversario. ENERO 2025. Nums. 1.196, 1.197, 1.198, 1.199.

 

En un cielo ennegrecido

tus ojos son dos luceros:

bellos faros de esperanza

que iluminan mi desierto.


Comenzamos ya el año 2025 y celebramos con alegría el 24 Aniversario de este Rincón que, semana tras semana, lleva la copla propia y ajena a los lectores de HERALDO y que cumple ya 1.200 números. Reiteramos en este inicio de travesía el deseo permanente de paz y de algo que jamás debemos perder: la esperanza. Hoy la primera copla del año se torna romántica y canta, cómo no, a unos bellos ojos de mirada amorosa que, en las noches grandiosas y apacibles, si bien muchas veces negras de presagios, aparecen ante nosotros como dos luminosas y necesarias luces de referencia y refugio. También esta noche la estrella de los Reyes Magos, que nos hace niños por unas horas, vuelve puntual e ilusionante y seguro que ayudará en el camino. Feliz año nuevo.




Yo dudo cuando te miro

con el vestidito azul

si es que tú vas como el cielo

o el cielo va como tú.

 

Luis Royo Villanova (Zaragoza 1867-Madrid 1900) fue un escritor aragonés que colaboró en varios periódicos de Zaragoza y Madrid, llegando a ser redactor-jefe de Blanco y Negro, donde publicó numerosos artículos en la difícil época de la agonía de nuestro imperio colonial. Fue popular autor de versos -"Manchas de tinta"- que le dieron fama y aplauso y en sus hermosas coplas supo conjugar la sensibilidad literaria del poeta con la percepción de lo aragonés. De ahí que esas coplas tengan la calidad de su buena poesía y el gracejo popular que las acredita y las convierte en micropoemas. Luis Royo-Villanova, hermano de Ricardo y Antonio, médico y político respectivamente, tiene dedicada una calle en Zaragoza, en cuyo cementerio está enterrado.



 

Cuando se murió le puse

un pañuelo por la cara

pa' que la tierra no toque

boquita que yo besara.

 

Esta hermosa copla, que me ha emocionado desde niño por su dramatismo, la interpretó con estilo inigualable el gran cantador de jota José Oto (Zaragoza, 1906- ibídem1961) y la dedicó a su gran amor, la jotera Felisa Galé, fallecida en 1948 a los treinta y seis años, que junto al propio José Oto y Pascuala Perié escribieron gloriosas páginas de nuestra jota cantada, en una época de oro de la más emblemática muestra de nuestro folclore aragonés. La canta es hermosa como lo fue Felisa, que también cantadora delicada y sensible compuso algunas bellas cantas, Desde su muerte, decayó la carrera del gran jotero que está calificado como el más grande cantador de jota de todos los tiempos y a cuyo entierro acudieron decenas de miles de zaragozanos.



 

Echando tierra por medio

dicen que un querer se olvida,

pero hay querer que no muere

si no le echan tierra encima.

 

Sixto Celorrio Guillén (Calatayud 1870- Zaragoza 1924) fue un destacado letrista de jotas y escritor de cuentos aragoneses. Sus obras "Paella aragonesa. Colección de cantares, cuentos baturros y composiciones festivas" (1901) y "Jotas. Cantares aragoneses" (1912) son sus libros más destacados de ambientación regional aragonesa. Celorrio, abogado, tuvo una destacada carrera política durante varios años en diversos destinos. Puede el lector curioso ampliar detalles biobibliográficos en obras de, entre otros, el profesor Barreiro y el periodista Juan Domínguez Lasierra, pues es una de las personalidades aragonesas más interesantes de su época y publicó coplas sobre todo en HERALDO. Tiene calles que lo recuerdan en su Calatayud natal y en Zaragoza. 

 

(HERALDO DE aRAGÓN, 5, 12, 19 y 26 DE ENERO DE 2025)

RINCÓN DE LA COPLA. XXIII Aniversario. DICIEMBRE 2024. Nums. 1,191, 1.192, 1.193, 1.194, 1.195

 

Monjita quieren ponerte,

 bien sabe Dios que lo siento;

monjita quieren ponerte

pero no de mi convento.

De nuevo traemos a este "Rincón" una copla de Luis Ram de Víu, considerado como el mejor de los poetas aragoneses del siglo XIX. Ram de Víu y Quinto, Barón de Hervés, perteneció a una importante familia aragonesa y su obra y gran actividad cultural en Zaragoza, así como su trayectoria vital ha sido analizada por los profesores Pérez Lasheras y Saldaña y también por María Ángeles Naval y Javier Barreiro, que han aportado importantes datos y puesto en valor sus abundantes publicaciones que desde estas líneas aconsejamos leer y disfrutar como homenaje a uno de nuestros poetas postrománticos más importantes y de una peculiar y apasionante actividad literaria. He aquí una copla como muestra de su quehacer poético, que es también diverso y variado.


 

Al jardín de los amores,

bajé contigo y allí,

para ti fueron las rosas,

las espinas para mí.

La jota aragonesa tuvo, mediado el siglo XIX, una expansión universal con una vía sinfónica a tras de dos personas: Florencio Lahoz (Alagón 1815- Madrid 1868) y Pauline Viardot-García (París 1821-1910), compositora y cantante de ópera y hermana de la famosa soprano María Malibran. La relación de estas dos personas está explicada en las publicaciones de la profesora Marta Vela: "La Jota aragonesa y cosmopolita" (2022, 2024, 2ª Ed.) y "La jota, aragonesa y Liberal" (2024), ambos coeditados por Eds. Pregunta y el Gobierno de Aragón, además de la publicación "Jotas cosmoplitas de Aragón de Florencio Lahoz a Pauline Viardot-García" Publicado por la Institución Fernando el Católico (2023). Un reciente CD, "La jota cosmopolita", recoge esta preciosa música.

 

 

 Cuando Dios creaba el mundo

en el cielo, una mañana,

arreglaba sus papeles

para venirse a Triana.

"Sevilla tiene un color especial" es el inicio del estribillo de la famosa canción de Los del Río, esa pareja folclórica que en 1993 arrasaron con su famosa "Macarena" paseándola con éxito sin precedentes por todo el mindo. Pero es verdad: Sevilla, a orillas del Guadalquivir, nos conquista cada vez que bajamos por allá. Tomando unos "pescaítos" en Alboreá, de Triana, nos obsequiaron junto a la cuenta -muy ajustada- con esta copla que no me resisto a repetir. Gracia, buen humor...y esa alegría sureña que Sevilla sabe exprear de manera maravillosa. Esta copla se la dedicamos a nuestra buena amiga la soprano sevillana Leonor Bonilla, que tanta emoción y belleza nos ha aportado con su Lucia de Lammermoor hace pocas semanas en nuestro Teatro Principal.



Paseando por tu calle

encontré mi corazón:

es el que yo te di un día,

y al parecer se perdió.

Se acerca Nochebuena. Románticos estamos en este Rincón donde, eso sí, seguimos pensando en la bondad de la copla como un micropoema y una de las bellas estrofas breves de nuestro rico idioma (seguidillas, soleares, redondillas, pareados, aleluyas...) que parecen denostar las vanguardias poéticas cuando también son un excelente ejercicio donde practicar el ritmo que intentamos llevar al llamado “verso libre”, que es todo menos -si es bueno- asequible y fácil. En estos días de agitación festera, invitamos a sentarse a nuestros lectores, leer un buen libro y dejar, al menos durante un buen rato, que bullan por ahí fuera los gritos y las jaranas. Paciencia con la lotería y campanadas de las televisiones y que el año que viene sea portador de PAZ.


Navidad y Nochevieja

fiestas son de gran postín

pero gastad con mesura

que enero no tiene fin...

Ayer fue el Día de los Santos Inocentes. Tradición cristiana que, tal vez debido a las circunstancias de nuestra sociedad, parece diluirse paulatinamente. Puede ser que el sentido del humor no esté -valga la redundancia- para bromas, o que las viejas "inocentadas" nos sucedan a diario aunque sean camufladas de recibos de luz, teléfono, subidas de impuestos o recortes en general. Lo del muñequito pegado a la espalda, pues, no tiene ya vigencia alguna. De ahí que realmente los inocentes seamos todos los ciudadanos de a pie que, con resaca de Nochebuena -y la que se prepara en Nochevieja- nos tememos lo peor para la consabida "cuesta de enero". Pues nada, amigos lectores: feliz 2025, si puede ser, y a gastar con mesura, comedimiento y sensatez.

 

(HERALDO DE ARAGÓN, 1,8,15,22 y 29 DIC. 2024)







domingo, 1 de diciembre de 2024

RESEÑA. "La copla, poema y canto", por Alicia Mendoza Kraus.

 

«La copla: poema y canto. Un recorrido histórico por la estrofa castellana más popular con parada en la jota aragonesa», de Miguel Ángel Yusta.
 
Un libro imprescindible para quienes se deleitan con la poesía.
Hay que reivindicar la copla. La historia de la literatura la escriben los vencedores de la crítica y estos pequeños poemas, aprendidos de memoria por el pueblo, han sido los grandes derrotados por las valoraciones de los puristas del Parnaso que escriben de espaldas a ese pueblo al que, en el fondo, desprecian. Hasta ahora, la copla había sido dolosa y dolorosamente borrada del mapa literario español y de las «Guías Michelin» de la poesía al uso.
La copla es poesía de estricta tradición oral, basada en su capacidad para ser cantada o recitada (quizás al oído de una muchacha o un muchacho), como lo pudo ser el Romancero clásico español.
En su complicada humildad podemos encontrar medida, ritmo y rima, que son los valores de una poesía del lenguaje que es la que con más fuerza llega al corazón de quienes la escuchan; coplas que hacen vibrar con sus armonías sencillas pero directas, con la fuerza descriptiva de sus historias de amor o de muerte, de tragedia o de comedia, concentradas con maestría en apenas cuatro versos.
A este respecto puede ser oportuno citar aquí a Ortega y Gasset, quien dijo que la poesía popular es la rebelión de las masas frente a la deshumanización minoritaria del arte. Pero creo que no es adecuada la división entre poesía culta y poesía popular, o entre poesía mayor y poesía menor sino entre poesía de emociones y sentimientos (poesía grande) o poesía hueca.
Yo creo que quienes la desprecian olímpicamente desconocen que los Machado, García Lorca, los Quintero, el propio Lope de Vega (que en letrillas y villancicos nos dejó muestras de su fecundo ingenio) no desdeñaban hacer una copla (porque sabían lo difícil que era hacerla bien). Si éxito tiene García Lorca con su «Romancero gitano» y si los españoles se aprenden de memoria y recitan «La casad infiel» es porque justamente es poesía sonora, con medida, ritmo y rima. Sin duda copla son también esos «vientos del pueblo» de Miguel Hernández.
Hay en este libro un prólogo de Juan Domínguez Lasierra y un estudio preliminar de Susana Díez de la Cortina, con quienes no me atrevería a compartir estrado, de modo que perdóneseme la osadía de las pobres líneas precedentes, fruto de la admiración por el autor de este auténtico tesoro y de las ganas de compartirlo.
Termino abrochando mis comentarios con una copla-dentro-de-otra-copla, que se puede leer en «La profecía», de Rafael de León:
«Quítate de la esquina,
chiquillo loco,
que mi mare no quiere
ni yo tampoco».
 
Alicia M. K.

viernes, 22 de noviembre de 2024

REVISTA TURIA, nº 152 . Pág 250 y sgts.

 



José Verón Gormaz y la Jota

Miguel Ángel Yusta


Soy, como dijo Sender,

un aragonés cabal

que come pan, bebe vino

y que dice la verdad.

(J. Verón)


1-Apuntes iniciales:

Escribir sobre una de las múltiples facetas artísticas de José Verón es misión harto difícil, sobre todo porque se abre un enorme abanico de posiblidades entreveradas por el sentimiento profundo y duradero de amistad que durante muchos años compartimos.

José, Pepe para sus amigos, era polifacético: desde la narrativa a la poesía, desde la fotografía -otra de sus grandes pasiones- a los largos paseos y conversaciones hablando de lo divino y lo humano. Sus grandes aficiones eran, entre otras, la lectura, el cultivo de la amistad, la visión y análisis del cine clásico y, como anécdota, una gran colección de plumas estilográficas, que gustaba de mimar y enseñar.

Estos breves rasgos nos definen a una persona inteligente, generosa, amante de su tierra, de su entorno, de sus amigos y de su trabajo literario y fotográfico. Y, como amante de su tierra y aragonés de pro, siempre fue un gran aficionado a la jota aragonesa, especialmente a las cantas, (que así se llaman las letras de las jotas) que cultivó con acierto y esmero como poeta, pues poesía es la copla si la escribe un poeta y la copla, cuarteta utilizada en las cantas joteras, viene a ser un micropoema cuando la escribe José Verón, que además se aleja del baturrismo al uso, aunque no renuncie a tratar temas genuinamente aragoneses con dignidad, elegancia y muchas veces un fino sentido del humor.


2-La copla.


Hasta las hierbas que pisas

al pasar por la rivera,

se arrodillan a tus pies

para que siempre me quieras

(J. Verón)

La poesía popular está arraigada tanto en el pueblo como en los poetas cultos, como demuestra la historia de nuestra literatura. En pocos casos los grandes poetas han despreciado esta gran oportunidad de expresarse cercanos al pueblo y en lenguaje alejado del hermetismo en que algunos se refugian (muchas veces para circunscribir su poesía a una élite determinada) amparados en fórmulas de ininteligibilidad. Pero si repasamos las obras de nuestros grandes poetas de todas las épocas vemos que precisamente en la claridad de su expresión radica muchas veces el peso de la calidad y pervivencia de su obra poética.

José Luis Melero, (1) escritor y bibliógrafo y buen conocedor de la poesía de Verón, dice en su extenso prólogo a "Cantares y presagios"-obra publicada en 2020 y que recoge una amplia antología de coplas y estrofas de arte menor del poeta- que "Sólo quien sigue libremente su camino al margen de pautas establecidas, sólo quien entiende que no hay poesía con mayúsculas y minúsculas sino poesía buena y mala, está capacitado para la decisión de trocar en algunos de sus libros la lírica culta por la lírica popular".

En esta certeza -que compartimos también en nuestro devenir poético- consideramos la obra de Verón, en su apartado de poesía popular, como transcendente y meritoria.

También Luis Alberto de Cuenca (2) en su conocido poema "Línea clara" aboga por un lenguaje poético que comunique y entienda la gente, que hable no tanto de lo abstruso y filosófico como del amor, la alegría, la amistad, la decepción, la esperanza...y ahí también nos encontramos con la estrofa popular, la que el pueblo comprende, comparte y difunde: la copla. Porque la copla, afirma también el escritor y estudioso Juan Domínguez Lasierra (3) "se nos ofrece en toda su entidad temporal y creadora, capaz de esencializar los sentimientos, emociones, vivencias más intensas con apenas unos cuantos versos, con unas cuantas 'palabras verdaderas' como exigía Machado a la poesía".

El profesor, investigador y estudioso de la jota, Javier Barreiro, (4) cuyos estudios sobre la copla y el foclore popular sientan las bases fundamentales de la investigación moderna comenta que "La copla podrá estar en el candelero o ser únicamente sostén del folclore popular, pero nunca dejará de ocupar su lugar natural en la forma de expresarse el pueblo" corroborando así el sentido culto y popular de la copla como forma poética, siendo la jota aragonesa, acompañada por la música (la tonada), una de las manifesaciones más bellas en que puede ser expresada.

Y una estudiosa, la doctora Susana Diez de la Cortina, (5) filóloga y profesora, en un amplio estudio preliminar del ensayo "La copla, poema y canto" nos afirma que "La copla es parte de nuestra cultura, tanto la popular como la culta, desde sus orígenes hasta nuestros días. Ha sido cultivada no sólo por el pueblo anónimo sino por los autores cultos, algunos de los más brillantes, por citar sólo unos pocos casos recientes, Antonio Machado, Rafael Alberti o Federico García Lorca".

También la doctora, investigadora y musicóloga Marta Vela (6) ha recogido en varias recientes publicaciones una interesante evolución de la Jota en su expansión cosmoplita que llevó música y coplas a todo el mundo en el S. XIX de la mano de grandes compositores, caminando paralelamente con su arraigo popular y conviviendo consecuentemente la muy diversa procedencia cultural.

He aquí pues una pequeña muestra de autores, investigadores y estudiosos de absoluta solvencia que justifican esa dualidad original de la copla, con su raíz popular expresada durante siglos y la vertiente culta a través de la dedicación a ella de poetas consagrados que, en toda época, han dedicado su atención a esta bella forma estrófica y que ha seguido en nuestros días con autores contemporáneos, como es el caso de Jose Verón.


3-La canta o copla de jota

Aunque sabido, no está de más recordar que nuestra jota aragonesa, de enorme riqueza en sus formas de canto y baile, se nutre para sus letras de la cuarteta, copla de cuatro versos octosílabos que riman en asonante los pares, quedando libres los impares (8-8a-8-8a) si bien en ocasiones se admite la rima consonante pues sobre todo los cantadores, muchas veces autores de sus coplas, se toman en algunas circunstancias esta libertad en función de la oportunidad y redondez de su canto.

Para la expresión de la copla con la música de la jota, la cuarteta se desdobla en siete versos, de forma que se comienza con el segundo, se sigue con los cuatro versos consecutivos y se termina repitiendo el cuarto y enlazándolo con el primero (2-1-2-3-4-4-1) de manera que la clave de una buena copla es que, al cantarla, ese cuarto verso se enlace con el primero de forma coherente, teniedo un sentido lógico y no quedando "descolgado".

Ponemos como ejemplo una de las coplas de Verón:


Un día de primavera,

al monte fui de mañana.

Los recuerdos se dormían.

Los campos se despertaban.

 

Que, cantada, mantiene su sentido poético y coherencia:

Al monte fui e mañana

un día de primavera

al monte fui de mañana

Los recuerdos se dormían,

los campos se despertaban.

Los campos se despertaban

un día de primavera.


De ahí que sea tan importante como difícil lograr esa bella armonía que ha de tener la copla como canta de jota aragonesa.



4-La jota en Calatayud

Las montañas de Aragón

se acercan a las estrellas

para llevar hasta el cielo

el sentir de nuestra tierra.

(J. Verón)

Calatayud, a orillas del río Jalón, es la cuarta ciudad más poblada de Aragón, tras sus tres capitales de provincia. Pero la cifra de sus habitantes, superior a veinte mil, no da idea de su impresionante actividad y su peso específico en la cultura aragonesa. Prolijo e innecesario es citar aquí los grandes personajes bilbilitanos y acontecimientos cuya historia se puede consultar en muy diversas fuentes, pero sí es oportuno destacar el gran entusiasmo y actividad de sus habitantes para hacer de su ciudad, "Muy noble, leal, siempre augusta y fidelísima", un foco permanente de cultura y afectos.

José Verón, digno sucesor en los siglos del ilustre bilbilitano Marcial, nació, vivió y murió en Calatayud, su ciudad, su casa y desde allí proyectó su actividad literaria y fotográfica, ampliamente reconocida a lo largo de su vida. Entre las numerosas distinciones, cabe destacar la Medalla de Oro de las Cortes de Aragón o el Premio de las Letras Aragonesas. Verón fue durante muchos años un símbolo vivo de Calatayud de la que también fue Cronista Oficial e Hijo Predilecto y siempre estuvo presto a la acogida y a la celebración (cuántas veces en el mundialmente famoso Mesón de la Dolores) de la amistad, disfrutando de manjar, bebida y palabra ante unas buenas viandas y un excelente vino de la denominación de origen Calatayud.

La jota llenaba en la vida y obra de José Verón un espacio muy especial, porque Calatayud es tierra de escritores que han cultivado la copla, desde Blas y Ubide, Sixto Celorrio, Joaquín Dicenta, Pedro Montón y otros muchos que harían interminable esta lista que culminó Verón. Es también tierra de cantadores representados hoy por el gran Nacho del Río, que con cinco Premios Extraordinarios en el Certamen Oficial de Jota continúa una carrera de triunfos honrando a esa tierra bilbilitana y siguiendo la estela de tantos que hicieron de Calatayud una de las cunas de la Jota aragonesa.

 

5- Las coplas de José Verón

Entran las primeras luces

dentro de tu habitación.

¡Ay, quién pudiera volverse

gozoso rayo de sol!

(J. Verón)

Muchos poetas famosos han dedicado a la copla alguno de sus trabajos aunque en algunos casos de manera esporádica. Cabe citar, entre muchos, a Rafael Alberti, Luis Cernuda, Gerardo Diego, Braulio Foz, Federico García Lorca, Ildefonso M. Gil, Jaime Gil de Biedma, Félix Grande, Ángel Guinda, Miguel Hernandez, Juan R. Jiménez, Pero M. Giménez de Urrea, Rubén Darío, Félix Lope de Vega, Antonio y Manuel Machado, Jorge Marique, José Martí, Ramón J. Sender...

Además hay una inmensa lista de autores, muchos de ellos anónimos, que en la actualidad cultivan la copla dentro de su poesía, igual que lo hacen con las estrofas como el soneto o la décima, no tan olvidadas como pueden pretender las generaciones de jóvenes poetas. José Verón, cuya obra de narrativa y poética se extiende a través de una vida cuyas circunstancias de salud fueron especialmente delicadas en muchas ocasiones, dejó una importante obra en arte menor, fundamentalmente en coplas, que él apreciaba de manera especial como aragonés amante de la jota y persona sensible.

La temática de las coplas de Verón es rica y variada en sus varios poemarios dedicados a ellas (7), pues escribe cuartetas que son bellos micropoemas de delicado lirismo y también coplas de temática aragonesa, su tierra, sus gentes sus fiestas, entreveradas con sutil ironía y sentido del humor aragonés tradicional, pero alejadas de ese baturrismo tópico y zafio, falsamente costumbrista, que tanto ha dañado la imagen de nuestro pueblo y que ya parece definitivamente alejado.


6- Conclusión.

Recuerdo que José Verón, en su precioso libro "Cantos de tierra y verso" (2002) libro de coplas y sonetos que tuve el honor de presentar y que dedicó al poeta Ildefonso Manuel Gil, afirmaba que "la poesía es magia", así como declaraba que "había que dignificar las coplas de la jota, muchas de ellas vacías y reiterativas".

Sus deseos siguen vigentes, como su obra y magisterio que, en lo referente a la Jota aragonesa concretamente a sus letras y a su interpretación, ha tenido una clara influencia renovadora. Aunque queda camino por recorrer, las cantas se van modernizando y adquiriendo carta de naturaleza con el impulso de los nuevos autores que la investigan e interpretan dándole merecida carta de cosmopolitismo y, como el querido y recordado José Verón Gormaz, contribuyen hoy con calidad poética y temática nueva a la necesaria renovación, apoyados en la tradición pero sin miedo al futuro.

Así sigue caminando firme nuestra querida JOTA, hoy candidata a ser reconocida por la UNESCO como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.


Terminamos estas líneas con unas coplas donde, desde los rasgos de humor festivo propio de las rondaderas hasta el lirismo más sutil, el poeta José Verón nos dejó una obra imperecedera. Sirva la última de emocionada despedida del poeta.


Una mujer de mi barrio

siempre lleva la contraria:

oye menos que un pandero

y es más gorda que una tapia.

 

Quieres que nuestros amores

desde el olvido revivan

pero el amor que se muere...

ese nunca resucita.


En Calatayud nací,

tengo sangre de su historia,

y la oración de sus torres

sube al cielo con mi jota.

 

 Con esta jota termino

porque la ronda se acaba,

y me despido cantando

porque me lo pide el alma


                                                            Miguel Ángel Yusta

                                                 Madrid-Zaragoza, junio de 2024

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1- J.L. Melero, prólogo a "Cantares y presagios, Huellas del camino, Cancionero del café" de J Verón.

2- Luis A. de Cuenca. 'Línea clara' de "La vida en llamas"

3- Juan D. Lasierra, La copla, género poético. Prólogo a M.A.Yusta. "La copla, poema y canto"

4- Javier Barreiro"La copla, emoción y poema". M.A Yusta. Epilogo.

(Ver también sus imprescindibles trabajos al respecto en su blog y sus numerosas publicaciones)

5- Susana Diez de la Cortina. Introducción a "La copla", ensayo M.A.Yusta.

6- Marta Vela. Jotas cosmopolitas de Aragón. (I.F.C.) y otras publicaciones.

7- Bibliografía al respecto de J.Verón:

                    Cantos de tierra y verso. 2002

                    Cancionero del cafe. Pequeños poemas para leer y cantar. 2014

                    Cantares y presagios (2020)








jueves, 21 de noviembre de 2024

RINCON DE LA COPLA XXIII Aniversario. NOVIEMBRE 2024. Núms. 1.188, 1.189, 1.190

 


Copla del amor callado,

cortejo de amante tímido:

si me hablas, bajo los ojos,

te miro cuando te has ido.

 La filóloga, poeta, ensayista y actualmente profesora en la Universidad de Córdoba, la oscense Susana Diez de la Cortina Montemayor, ha publicado media docena de poemarios hasta la fecha y desarrolla una labor investigadora importante, además de colaborar en prensa. Escribe con gran sensibilidad, voz poética propia y dominio del lenguaje. En su último libro (Migraciones. Ed.Olifante 2024) expone "un libro de estructura especular que se inspira en la idea de la vida como puro moviminto de todo lo animado, tanto animal como humano". Son sesenta y cuatro poemas organizados en cuatro series y entre ellos, que presentan diversas estructuras estróficas, nos encontramos con esta bella cuarteta que, con otra más, complementa y rubrica el poema "Cortejo"


Eres como el girasol

pero hay una diferencia,

que el girasol mira al sol

y tú al sol que más calienta.

La finura de sentimientos aparece con frecuencia como una de las facetas más habituales en las coplas de jota aragonesas, cuando su letra abandona los numerosos tópicos y se universaliza. Muy diversos autores, la mayoría poetas, han ennoblecido las cantas con su aportación. Luis Ram de Víu (Zaragoza 1864 - Rubielos de Mora 1906), escritor postromántico, es uno de esos "poetas de la copla": elegancia y pulcro estilo adornan sus cuartetas que frecuentemente componía en el cementerio zaragozano, de ahí que se le denomine como el "poeta de los muertos". La melancolía frecuente en sus coplas mezcladas con un punto de nostalgia las hacen intimistas y propias para el canto delicado de jotas que lleguen al oído y profundicen en el alma del oyente.


Si te dicen que te engaño

no creas al mensajero,

que hay gente muy envidiosa

de lo mucho que te quiero

La copla, micropoema y una de las estrofas más bellas y populares de la lengua española, -junto a la seguidilla, con o sin coda, y la soleá- es capaz de expresar en cuatro versos octosílabos todo un mundo de sentimientos y sensaciones. Actualmente vive unos momentos de revitalización y popularidad pues parece ser que el lector no experto en lecturas poéticas más complejas, disfruta de estas formas populares que pueden también tener gran contenido si son escritas con solvencia. El poeta Luis Alberto de Cuenca, en su libro La vida en llamas señala en su poema 'linea clara' que: «la poesía no ha de ser un tedioso festín existencialista e incomprensible para los miembros de una secta, sino una fiesta alegre y comunicativa donde quepamos todos».


Heraldo de Aragón , 3, 10, 24 nov. 2022


































sábado, 26 de octubre de 2024

LA LETRA DE LA JOTA

 

La letra de la jota
Miguel-Ángel YUSTA

Es más que evidente el compromiso del ser aragonés con la jota. Aunque esté demostrado suficientemente que la jota es amplia en su geografía y abarca muchas regiones de España, no parece menos cierto que la raigambre popular de la jota aragonesa la constituye en paradigma de todas ellas y en el máximo exponente, en cuanto a fuerza expresiva y belleza en su cante y baile, de toda la diversidad del rico folklore español. Pero con ser rotunda la música y bellísima en su variedad la coreografía de la jota bailada, quisiera detenerme, en este pequeño trabajo, en el aspecto básico que engendra la jota: en la copla aragonesa, canta o cantica que, cantada, se convierte en jota. Es la letra de la jota su esencia especial, que la hace, en palabras de Darío Pérez: “Alegre en nuestros campos, fecunda en nuestras fiestas, bizarra en nuestras rondas, noble en nuestras contiendas, dulce en labios de la amada, ingenua en boca del pueblo, santa en caricia de madre.” Y además –añado- himno, lamento, oración, socarronería, piropo, ironía, critica, reflejo de amores, de vida cotidiana, loa de personajes populares, canto al Pilar y al Ebro, a la tierra y a la patria, crítica política y testimonio de aragonés y baturro, en el sentido moderno, dignificado y afortunadamente redimido de esta palabra.

Terco,independiente,austero

sobrio, seco, brusco y duro

tierno, sereno y ardiente:

aragonés... y baturro.


La copla propiamente aragonesa o canta ha de ser de cuatro versos octosílabos, asonantados el segundo con el cuarto (aunque muchas y buenas letras son aconsonantadas y cuartetas). Cuatro certeros dardos que han de expresar con brevedad, concisión, gracia y belleza, la idea y el sentimiento del autor, y ser susceptibles de cantarse con cierta facilidad en la expresión vocal del jotero, para que pueda lanzarla al aire con rotundidad, sin extraños trabalenguas que empobrezcan y empañen la expresión franca de los versos. A ello contribuye la manera de cantar los cuatro octosílabos ya que, comúnmente, se inicia la jota con el canto del segundo verso, seguido del primero, se repite el segundo, se dicen tercero y cuarto y se acaba el canto enlazándose nuevamente con el primero, constituyendo, así, siete versos cantados. Esto ha de tenerse en cuenta a la hora de componer la copla para que sea coherente su sentido al interpretarla. Cargar la fuerza en el segundo verso, que inicia el cante y encadenar el sentido del cuarto con el primero, que terminan la jota, son algunas de las importantes condiciones para que llegue al oyente en plenitud expresiva. Así la copla:


Para decir que me quieres

mírame antes a los ojos:

verás cómo no hacen falta

palabras entre nosotros,


al cantarse, lo sería de esta forma:


Mírame antes a los ojos:

para decir que me quieres

mírame antes a los ojos.

Verás cómo no hacen falta

palabras entre nosotros.

Palabras entre nosotros,

para decir que me quieres.


Pero al margen de consideraciones técnicas, que eruditos con admirable magisterio exponen en sus fundamentales obras sobre la jota aragonesa (Galán Bergua, Solsona, Zapater, Cester Zapata, Turón, Melero, Artiaga, Vela, Barreiro...) y que invito a consultar al lector amante de nuestro folklore, quisiera destacar la copla como un factor básico, expresivo, maravilloso en su brevedad y por ello meritorio en su elaboración, que puede ser seda o acero en el oído, tema de actualidad, vehículo de transmisión y que tal vez hoy tiene sus ejes desgastados y oxidados por la monotonía impuesta por repertorios “de siempre” que estrangulan la salida de nuevas coplas que revitalicen los tópicos y amaneramientos de muchas de nuestras jotas. Claro que hay letras maravillosas en los repertorios de los joteros, pero son también muchas las que se repiten hasta la saciedad porque el cantador ya las ha adaptado a la tonada, y quedan en la oscuridad coplas extraordinarias de muchos autores que, con temas renovados, intentan que la jota sea un vehículo dinámico, vivo y palpitante, de transmisión de la más rabiosa inquietud y actualidad en todos los órdenes.

Los concursos de coplas aragonesas son escaparate donde salen a la luz muchas de estas renovadas e ilusionadas canticas, pero luego quedan, salvo honrosas excepciones, en el olvido más absoluto. La jota, nuestra jota aragonesa, ese canto fuerte, rotundo, penetrante, pero también tantas veces caricia sensible, ha de revitalizarse y renovarse en su letra como se renuevan cada día nuestras inquietudes y deseos. Nuestra tierra ha dado escritores magníficos que no han tenido empacho en escribir coplas de jota inmortales. Gentes del pueblo, anónimos, han creado las mejores canticas en tiempos pasados. Hoy debemos, más que nunca, invitar e incitar a nuestros paisanos escritores y copleros para que la copla aragonesa, renovada, sea cada día más válida como modo de expresión genuino de nuestra gente y a los joteros, a seleccionar las mejores de entre ellas, adaptarlas a las tonadas y convertirlas en jotas.

La Jota en la intimidad.

Que la jota sea casi siempre sinónimo de fuerza, rotundidad, canto al viento y al sol, no quiere decir que no haya de ser también, y muchas veces, vehículo de los sentimientos más delicados. En ese sentido hay letras de jota que constituyen pequeñas obras poéticas que, convenientemente cantadas, hacer aflorar la emoción al destinatario oyente. Coplas de amor y belleza que desdicen la tópica creencia de que sólo los aires del sur pueden sugerir cosas bonitas al oído y en la intimidad, ya que resultan hermosísimas y emotivas con el aire de una jota y más si se cantan en el inigualable espectáculo de la ronda aragonesa:


Cuando rondo por la noche

voy pensándome una jota

para dejarla prendida

en el balcón de mi moza.


Y es que la rondalla es, en efecto, uno de los más hermosos espectáculos del folclore aragonés. Ojalá que se vaya revitalizando, que los grupos salgan más a rondar, que se ronde como antaño por esas calles, paseos y plazas de nuestras ciudades y pueblos rompiendo la noche el sonido de las guitarras y las templadas voces de los joteros, abriendo balcones y ventanas, llevando la jota al corazón del oyente que, emocionado, se constituye en parte activa siguiendo la ronda. Quien no ha seguido una rondalla rompiendo la noche, se ha perdido una de las más hermosas emociones que puede sentir un aragonés.


Al rondarte vi la luna

reflejadica en tu cara.

Desde entonces voy de noche

a soñar a tu ventana.


Hay pocos espectáculos que pongan la emoción tan a flor de piel como una rondalla aragonesa. Es el momento de la intimidad de la jota, aunque esa ronda sea multitudinaria. No es el recital, ni el teatro, ni el festival folclórico, ni la boda con el grupo jotero animando el final: es la jota pura, genuina, desnuda de parafernalia, callejera, sobria, verdadera, con el único decorado de la noche y las estrellas. La jota aragonesa, grandiosa expresión de un pueblo, que todos estamos obligados a enriquecer, acrecentar y propagar.

viernes, 25 de octubre de 2024

UN ARTE LLAMADO JOTA. Introducción.

 


Presentación de este gran espectáculo sobre la jota aragonesa en el Teatro Principal de Zaragoza los días 30 y 31 de octubre  y 1,2,y 3 de noviembre de 2024.

 

INTRODUCCIÓN.

LA EMOCIÓN, EL MISTERIO, LOS SONIDOS: EL TEATRO

En este espectáculo, Un arte llamado jota, nos encontraremos con la magia, la luz, la belleza, el milagro, porque la jota es milagro que traspasa el escenario e inunda, ilumina, emociona y se proyecta, hecho música y voz, estremeciendo los corazones.

ESCUCHAD aquí la belleza, percibidla, porque es pura sinfonía de movimiento, voces, música y luz, lo que esta caja mágica estará derramando sobre vosotros.

CONMOVEOS con estas melodías ancestrales que son preciosa herencia de nuestros antepasados y que han mecido al pueblo que las erigió y también asombrado a los más grandes compositores del mundo creando la jota sinfónica y a gentes de muy diversas geografías, arrancando emociones y aplausos en todo el orbe.

SENTID el latido de los tiempos, el vibrante ritmo que es tan familiar a vuestros corazones y os hace recordar y revivir los paisajes, la montaña, la tierra, el valle, el río, los hombres y mujeres de vuestra infancia y conectar con el alma de quien os lo transmite hoy con la música, el baile, la palabra y la emoción que tiende un hilo invisible de amor que nos une.

COMPARTID los momentos mágicos en los que se fusionan tierra y canto, cielo y agua, luz y alegría, fiesta, tradición, amor al pasado y esperanza en el futuro: la evolución ya inmersa en el siglo XXI.

EMOCIONAOS definitivamente porque estamos ante la seña aragonesa más universal de nuestro ser y sentir y porque cuando escuchamos un arte llamado jota percibimos que algo se mueve en el alma.

APLAUDID con las manos y con el corazón porque así la fusión será perfecta y se elevarán juntos las voces, las músicas y vuestro aplauso, proyectando hacia el futuro un sentimiento común tan hermoso como nuestro canto: el deseo de un mundo donde reinen el amor, la paz y la armonía, porque:

 

La jota es flecha lanzada

desde el corazón al cielo

y desde Aragón proyecta

su belleza al mundo entero.


Comienza la magia y la belleza:

EL ARTE SE LLAMA JOTA.

                                                                                    Miguel Ángel Yusta

                                                                                                                    Académico de Honor 

                                                                                    Academia de las Artes del Folclore y la Jota de Aragón

viernes, 11 de octubre de 2024

FIESTAS DEL PILAR 2024. Coplas diarias.

 

 

FIESTAS DEL PILAR, ZARAGOZA 2024 5 AL 13 DE OCTUBRE

 (Publicadas en Heraldo de Aragón)


5 sabado

Todos me dicen que tienes
otro amor en la ciudad
¿pero quién tendría celos
de la Virgen del Pilar?
........

6 domingo

Junto al Pilar duerme el Ebro
acunado por la jota
y la Virgen en su templo
lo contempla silenciosa.
........

7 lunes

A la Virgen del Pilar
me fui a pedirle una gracia,
y ya me encontré mejor
solamente con mirarla.

...........

8 martes

Al venir a Zaragoza
visita siempre el Pilar:
verás un río constante
de amor, oración y paz.
......

9 miercoles

A la Virgen del Pilar
le cantan miles de coplas,
más de corazón se rezan
las más hermosas de todas.
............

10 jueves
Las flores bordan su manto,
las estrellas, su corona,
y es el alma de Aragón
columna donde se apoya.

...............

11 viernes
Zaragoza hoy es un río
de promesas y oraciones
que fluyen hacia el Pilar
con un aroma de flores.

................

12 sábado

Pilar tu nombre, Pilar
es columna donde reinas
formada de corazones
que te abrazan y veneran.

..............

13 domingo
La Virgen del Pilar tiene
un manto de flores bellas
y es cada flor que la adorna
un corazón que la sueña.